♡<Mi Imaginación>♡ (T/ObiDei

♡Capítulo 11♡ ◇𝑃𝑟𝑖𝑚𝑒𝑟𝑎 𝑚𝑖𝑠𝑖𝑜𝑛 3/4◇

Al día siguiente, los tres individuos se levantaron en la dichosa cueva. Deidara estaba muy confundido, no sabía el porqué estaba hay, solo despertó recargado sobre Tobi, Deidara el intentar levantarse, de inmediato sintió un fuerte dolor de cabeza, y un dolor agudo y algo fuerte en sus caderas, "Joder, pero que paso mientras estaba dormido?" Eran los pensamientos del rubio, que aún intentaba mantenerse parado en su lugar.

Miko escucho una queja, era una queja del rubio, por lo que la despertó al instante, se puso a alerta y se levantó de inmediato, encontrándose al rubio recargado sobre la rocosa pared de la cueva, esta misma se tranquilizo al solo ver que era su compañero, iba a ir a despertar a Tobi, le pateo y el chico de cabellos azabache se despertó de inmediato, Miko sonrió a través de la máscara, cuando iba a ir hacia afuera de la cueva, un fuerte dolor de cabeza se lo impedía, el dolor era tan fuerte que cayó de rodillas, sujetando su cabeza.

Tobi al verla en ese estado se levantó y de inmediato fue hacía la enmascarada. Miko por otra parte recordaba el porqué el fuerte dolor.

¿Recuerdos...? No, solo una explicación.

Miko antes de salir de la cueva Akatsuki, comió "una" pastilla, ¿Cuál era el problema? Si está enferma no hay problema...

Si, ese no es el problema, el problema estaba en esa pastilla, la pastilla no era del todo fuerte, el problema es que... ella tomo seis pastillas de el frasco... eso provocaría una emoción extremamente imparable... eran pastillas de la "felicidad", joder, porque tomaría esas pastillas, si de todos modos ella es algo seria... solo recordemos la pequeña reunión de ella y Tobi, en donde se enbarraron de pastel.

Mucho bla bla sobre esa idiotez, pero es importante, Miko sufrió de depresión durante dos años seguidos y enteros, sin contar un año y tres meses que empezaron, aún sigue en esa depresión de un año y dos meses, solo puedo decir, que gracias a esas jodidas pastillas la mantenían alegre, ¿que tanto sufrió esta chica? Bueno, ya contamos la muerte de sus padres, ¿no? Solo faltan unas 11 más, que pensabas, su familia es numerosa, pero no de sangre, aún así la quiere como su familia, si solo contamos a los más importantes, solo faltaban con vida unas tres personas.

...

Miko se puso a descansar un rato para tranquilizar el dolor, Deidara había ido a un lago a por agua, y Tobi... bueno el estaba con Deidara. Después de tomar agua y comer algunos frutos, ambos tres marcharon con la misión.

Estaban los tres a las afueras de las aldeas, digamos que estaban a 23 metros de distancia, ya que en la entrada de la aldea había guardias custodiando el lugar. Los tres chicos subieron a la rama de un árbol, viendo por donde atacar.

-Yo los mataré con una explosión, hm. —dijo algo orgulloso el rubio—

-Ho, entonces valla y mate los, ha sangre fría sin piedad. —la última oración lo dijo en susurro, pero lo susurro lo suficientemente algo para que los hombres la escucharan—

-Usted me da miedo Miko-senpai. —dijo con un notable miedo—

-¿Me-me escucharon...? —pregunto asustada—

-Juro que hasta los guardias te escucharon, hm. —dijo sin apartar la mirada de los guardias—

-¡Ya se! ¡Que Miko-senpai ataque a los guardias, para poder ver las habilidades detrás de su máscara! —dijo alegre el chico bueno—

-Nada mal Tobi, anda y ve Miko. —hablo primero mirando a Tobi y después a Miko—

-Bueno. —dijo sin ánimos—

Y así empieza todo, Miko bajo del árbol, rápidamente y sin perder tiempo, fue directo a donde los guardias. Los guardias al verla con la capa Akatsuki, sacaron los kunai, un guardia lanzó su kunai, el arma filosa fue esquivada al instante por Miko, quien no parecía contenta, luego los demás guardias le lanzaron más kunais, Miko parecía una loca esquivando cada kunai.

Dejo de esquivar los objetos y fue directo a un guardia, se lanzó hacia el con el pie de frente dándole en las costillas, después de derribar a ese guardia fue a por los demás.

"Esto me trae recuerdos... muy malos recuerdos..."

Solo quedaba un guardia, él cual recién había salido a proteger a sus compañeros.

-¡No eres rival para mí! —grito el oponente—

-Demuéstralo. —respondió—

El oponente sacó un kunai y fue a donde Miko, la última solo metió su mano derecha en su capa, y después corrió hacía donde el oponente. El la kunai del oponente dio directo hacía el estómago de Miko.

Deidara lo había visto y solo quedo quito, poco de un minuto reaccionó al no ver a Miko moverse, iba a ir por el enemigo pero Tobi le interrumpió.

-Espere... —dijo sosteniendo del hombro a el chico menor—

Miko cayó al suelo aún con el kunai insertado, quedó boca arriba, el enemigo solo se río y sonrío como un completo estúpido, su sonrisa se borro y escupió sangre, vio su corazón y si. Tenía una maldita bara de hierro perforada en su corazón. Y rápidamente cayó al suelo.

Miko se levantó como si nada y lo pateo.

-Tch, idiota. —dijo quitándose el kunai insertado en su estómago—

Deidara quedo boquiabierto, en que maldito momento saco una barra de hierro. Tobi bajo del árbol dejando a un Deidara completamente confundido.

Deidara reaccionó y bajo del árbol, luego los tres entraron a la aldea, fueron a el hogar donde vivía el objetivo. Miko se arrepintió por ir a donde ese tipo tenía un hogar, claro si es que a ese lugar se le llamaría hogar.

Esperaron hay unos minutos y el objetivo regreso a su hogar, este no se había dado cuenta de que tenía invitados, pues estos estaban escondidos.

El objetivo dejó una libreta y se metió a bañar, Tobi tomó la libreta, y como la velocidad de la luz, salieron sin dejar rastro alguno, se detuvieron en un callejón y acertaron un lugar.

El casino.

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