Chispa alfa

Capitulo 4

La discusión se estaba acalorando casi saliéndose de las manos para Peter que estaba sosteniendo a un muy enojado Scott que no paraba de insultar a su hija y está estaba siendo igual sujetada por Erika y Liam; el resto de la manada miraba sin saber que hacer aun procesando todo lo que estaba sucediendo.

— ¡Ya basta!– grito Derek poniéndose en medio de ambos.— Me vale una puta mierda su situación aquí lo que me interesa es saber por qué Stiles fue atacado por una granada de luz si estaba siendo perseguido por un wendigo.

Scott había dejado de luchar para que Peter lo soltara.

— Le pedí ayuda a Christopher Argent con el wendigo, le dije que si lo veía en su territorio lo neutralizara... El dijo que fue un accidente que alguien de su escuadrón aventara a los pies de Stiles la granada.

— ¡Que!– grito Peter.— Argent.– toda esa situación en verdad que estaba poniendo aprueba su paciencia.

Erika miro molesta a Scott por aquella información al igual que Boyd que se ha mantenido al margen de toda la situación.

La situación no explotó más por qué alguien había tocado el timbre de la casa y por la forma tensa que se puso Scott reconoció rápido el olor de aquella persona que sonreía amablemente a Derek quién le abrió la puerta. Todas las miradas estaban puestas en el nuevo invitado sorpresa que los veía igual a todos reconociendo algunos olores y viendo caras nuevas, saludo cortésmente a Peter con un apretón de manos.

— Deucalion que bueno que llegaste.– dijo sinceramente el Hale mayor.

— Bueno estaba cerca cuando recibí tu mensaje y por la urgencia debió de ser algo muy importante.– suspiro el lobo alfa viendo a todos .— Es un placer verlos.– sonrió ante su propio chiste que nadie más captó.

— No quiero sonar grosero pero ¿Que haces aquí Deucalion?– pregunto Scott viéndolo molesto.

— Yo lo llame.– intervino Peter.— El nos podrá ayudar con la situación de Stiles.

Deucalion se mantuvo callado y sonriendo levemente pero por dentro estaba analizando la situación notando claramente la ausencia de aquel chico de lunares que olía a ansiedad y a medicamento, también estaba intrigado por la clara brecha que había entre algunos miembros con el alfa. Por muchos años él se dedicó analizar a manadas y sabe por experiencia propia cuando una manada no respeta la jerarquía con el alfa creando una desigualdad de poder y mucha inestabilidad emocional.

— No encuentre mi presencia irrespetuosa, alfa McCall, no vengo con segundas intenciones solo estoy aquí para ayudar a un viejo amigo.– sus latidos demostraban que no estaba mintiendo.

Scott solo asíntio con la cabeza ya resignado por la presencia de otro alfa en Becon Hills.
Los pasos apresurados de Noah diciendo que Stiles ya había despertado pusieron a todos nerviosos que salieron casi corriendo de la casa con dirección al hospital, en el Camaro se subió Derek con Cora, Erika y Boyd mientras que en la patrulla Noah y Peter le explicaban a Deucalion la delicada situación de Stiles.

El alfa no pudo evitar simpatizar con el humano mientras que feos recuerdos llegaban a su mente por dicha situación.
Al llegar al hospital era evidente que no todos podían entrar por lo que solo pasaron Derek, Peter, Noha y Deucalion siendo el Sheriff el primero en entrar para tranquilizar a su hijo que recién estaba superando el control de su cuerpo debido a los sedantes.

— Pa... pá ¿Por...que no te... Puedo ver?– balbuceo Stiles llevándose las manos a la cara sintiendo la venda al rededor de sus ojos.

— Tranquilo muchacho no te las vayas a quitar recién tuviste una cirugía.– con delicadeza tomo la mano de su hijo de la cara.— Los Hale regresaron ¿Quieren que pasen?