¿Como olvidarte?

Capitulo 10.- El amor como un juego de niños

Durante clases no deja vas de verme, y cuando volteaba a verte rápido te volteabas.
Ya no pensaba en Daniel eso era seguro, ahora pensaba en ti.
Pero eras tan tímido no te atrevías a  abrazarme yo tenia que ir y con mucha ternura te abrazaba, yo solo sentía como a veces te temblaban las manos, tu nunca habías tenido una novia. Pasamos algunas dos semanas así jugando coqueteando muy de repente tomabas mi mano y empezabas a jugar con ella diciendo que era muy suave mi mano.Cada uno de tus gestos así mi estaban llenos de amor y ternura, muchas veces eras tímido y no te salían las palabras.

Mis amigas querían que saliéramos a un café y les dije que si.Para mi sorpresa tu estabas allí te veías muy nervioso y emocionado a la vez, parecías un niño esperando a que abrieran la juguetearía.
Todas estaban muy sospechosas pues no dejaban de verme y soltar risitas.
No les di mucha importancia pero toda esta situación me tenia intrigada.

Entramos en un cuarto parte del café, todo iba normal platicábamos y jugábamos entre todos, eras el único hombre , así que eso lo hacia aun mas sospechoso. De repente mis amigas salieron a buscar al mesero porque no llegaba con nuestros cafés y casualmente apagaron la luz cuando la volvieron a abrir tu tenias una caja grande de regalo y una enorme sonrisa en tu rostro, yo la sujete y estaba tan nerviosa  que no podía  abrirla, al fin después de varios intentos tu abriste la caja y adentro había un lindo peluche, era un oso que tenia los ojos tan pequeños como tu era una ternura, mis amigas regresaron y nosotros estábamos sentados juntos en un sofá. Yo sinceramente pensé que  esa había sido tu forma de pedirme que fuera tu novia, y yo ya no esperaba otra sorpresa.

Después de unos minutos llego el mesero con nuestros cafés, yo estaba muy feliz y a ti no te cabía la sonrisa en el rostro, platicamos y reímos un rato, cuando sin aviso mis amigas se volvieron a salir y pagaron la luz, yo de momento creí que estaban jugando y solo empece a reírme, pero cuando prendieron la luz tu tenias una rosa en tu mano te temblaban las manos y me dijiste "¿quieres ser mi novia?" , mi pecho se lleno de emoción, nunca alguien había echo algo así por mi,  solo te dije que si y después te abrace y te di un tierno beso en la mejilla.

Ahora si ... nuestra historia de amor había comenzado