Una gran familia Weasley Feliz

Capítulo 9 : Domador

Hogwarts, 1 de septiembre

Harry se dejó caer en una mesa de Gryffindor que era un poco nueva para él. La gente habitual que lo rodeaba: el dúo hablador de Lavender Brown y Parvati Patil, la presencia tímida de Kellah Mudiaga, la majestuosa Fay Dunbar, el verboso Usanga Bem, el entusiasta Seamus Finnigan, el tranquilo Dean Thomas y el tranquilo pero fuerte Neville Longbottom. ya no estaban, habiendo aprobado sus EXTASIS a principios de año. Los EXTASIS se pusieron a disposición en algún momento de agosto para aquellos estudiantes que no pudieron darlos durante la guerra. En retrospectiva, Harry debería haber dado los EXTASIS, pero Hermione y Ron insistieron en regresar a Hogwarts para pasar un año sin preocupaciones, por última vez. Y la verdad sea dicha, Harry no se oponía del todo a esa idea.

Sin embargo, la falta de sus antiguos compañeros de año era desconcertante. Ahora, mientras aún tenía a Ron y Hermione con él, estaban sentados dos asientos a su derecha. Además, Ron y Hermione fueron Premio Anual y Premio Anual durante el último año en Hogwarts, y con razón, en opinión de Harry.

Hermione había sido completamente extraña con él desde la fiesta de Pascua: rara vez había visitado la Madriguera, y cuando lo hacía, lo evitaba como si fuera una plaga, o lo empujaba contra la pared más cercana y le quitaba la vida antes. huyendo como un maníaco. Ella alternaba entre la culpa, la pasión y la indiferencia tan rápido que lo dejaba atónito. Ron parecía estar tan despreocupado como siempre, hasta el punto en que Harry tuvo que preguntarse por qué estaba en una relación con Hermione. Ron le dijo a Harry que le encantaría ver que se repitiera todo el asunto con Hermione, pero Hermione seguía entreteniéndolo cada vez que Ron sacaba el tema. Sin embargo, Harry estaba un poco aliviado por eso, no estaba muy seguro de querer que Hermione se acostara con él porque Ronle había dicho que lo hiciera. Quería a la adorable niña de pelo tupido. La amaba , sus sentimientos por ella no eran menores que los de Ginny. Sin embargo, estaba contento de esperar desde lejos mientras Hermione tomaba una decisión.

Sin embargo, en este momento, justo después de la Selección, Hermione parecía completamente aburrida y Ron parecía estar charlando con uno de los compañeros de año de Ginny... o uno de los compañeros de año de Harry ahora. Sin embargo, de vez en cuando, Hermione miraba a Harry y miraba a las mujeres que lo rodeaban.

Y Harry estaba rodeado de mujeres: era un poco desconcertante estar rodeado exclusivamente por mujeres en Hogwarts. A su izquierda estaba sentada Ginny Weasley. A su derecha, Demelza Robbins había bloqueado el paso de una ansiosa Romilda Vane, y Harry estaba muy agradecido con su compañero de Quidditch por eso. Justo enfrente de él, para gran desdén de Ginny, estaba sentada una extremadamente hermosa Gabrielle Delacour, la nueva estudiante de intercambio de Beauxbatons. A cada lado de Gabrielle estaban Nandini Johar y Natalie Fairbourne, dos chicas del año de Ginny, ahora en el suyo.

Y todos alternaban entre coquetear con él y abuchear a Ginny. Si bien Ginny pareció tomarse la mayor parte de las bromas con calma, eso no le impidió tener intensos e improvisados concursos de miradas con Gabrielle. La misma media veela parecía estar un poco desanimada por la gran cantidad de atención masculina que parecía estar recibiendo mientras estaba sentada con el cabello suelto en la mesa de Gryffindor; era mucho peor que cuando Fleur se había sentado en la mesa de Ravenclaw.

Sin embargo, eso no impidió que Gabrielle se uniera a toda la diversión: rápidamente se había hecho amiga de todas las chicas que rodeaban a Harry, excepto de Ginny, para disgusto de la pelirroja.

Y los delicados pies de Gabrielle ahora estaban justo contra la entrepierna de Harry. Harry estaba tratando de escuchar a McGonagall hablar sobre su proyecto favorito, el torneo entre escuelas, y describir cómo se seleccionaría a los estudiantes que deseaban participar, pero los pies de Gabrielle eran muy diestros . Había enganchado sus pies justo debajo de la túnica de Harry debajo de la mesa y se deslizó hasta que la túnica de él se amontonó alrededor de sus muslos, dando a la media veela acceso total a la entrepierna de Harry. Luego procedió a desabrochar sus pantalones y bajarlos, todo con los pies.ante la incredulidad (y admiración) de Harry, hasta que estuvieron alrededor de sus tobillos. Y ahora estaba persuadiendo a su pene a través de la raja en sus boxers. Su pene ahora estaba completamente erecto y empujaba su túnica hacia arriba, protegiéndola. Los pies de Gabrielle alternaban entre tirar de su pene con los arcos de sus pies y masajearle las bolas con los dedos de los pies.