War Of Hearts ( guerra de corazones) ~Kookmin~

Capítulo ~18

"¿Qué está bien, o que está mal? ¿Por qué blanco y negro? ... ¿Que hay del gris?"

La campaña sol ardiente dio iniciativa en tierras oscuras, dándose su primera victoria a la alianza, atacando con agresividad a unos de los clanes más importantes del Reino demoníaco.

El equilibrio se rompió, el destino escogió un bando, la flor de la vida se marchitó, inundaciones comenzó, el fuego ardía cuyas llamas del infierno.

- ¡GANAMOS!

Las exclamaciones de Las victorias se oían hasta el lugar más lejano del mundo. Batalla tras batalla. No había vuelta atrás, el caos comenzó.

No demoren tanto Reyes del todo. Pronto no habrá nada que gobernar...

Palacio escarlata
(Reino mortal)

Había pasado ya dos meses de ese terrible momento, dónde pensó que no podría caer más bajo que la deshonra.

Cansado, agotado, sin alma. Era como se sentía jimin, esperanzas y fé, era lo último que tenían.

- El principe heredero está aquí!

La fuerte y molesta voz del guardia se escuchó anunciando la llegada del príncipe Jungkook.

Cómo modo automático jimin y beomgyu hicieron una reverencia de 90° haciendo suspirar fuertemente a pelinegro.

- Salgan todos- ordenó haciendo que todos salgan rápidamente excepto beomgyu y jimin- tu también - señaló al castaño, quien le dió una mirada dudadosa al peli rubio, pero saliendo igual, no podía desobeder, el miedo calaba sus huesos.

Ya asegurándose de encontrarse completamente solos, Jungkook se acerca
a un nervioso Jimin, quedando lo suficientemente cerca que podía sentir su respiración en la piel, haciéndole erizar por completo.

- Alteza... ¿Que hace?

Dijo confundido en un delicado susurro casi audible. Sus ojos vagan por el atractivo rostro del príncipe, deteniéndose varias veces en los delgados labios rosas del contrario.

- No he dejado de pensarte Jimin... Por tu culpa mis noches son inciertas.

Sorprendido y confundido Jimin alzó su mirada viéndole fijamente a Jungkook. No podía creer lo que acababa de oír.

- ¿Qu-e?... No comprendo.

Jungkook paso sus manos delicadamente por esa pequeña y muy bien formada cintura sintiéndose casi completo. Mientras los ojos del peli rubio se abrieron asustado de dicha acción.

- Ni yo lo comprendo, pero no puedo evitar morirme de las ganas por sentir tus labios. Por saber a qué saben, muero por sentirte Jimin y eso me está volviendo loco - la desesperación en su voz desconcertaba a Jimin, hace dos meses la persona que lo mantiene sujetado de la cintura lo ha estado humillando y pisotiando.

Que de un momento a otro le diga todo esto le impedía ceder a creerle. Su miedo a admitir que también había estado pensando en el, que se estaba enamorando de su secuestrador prácticamente, por qué es la persona que le robó la libertad.