15

49 8 3
                                    

El verano llegó más rápido de lo que pude darme cuenta y nunca podré olvidar el último día de clases trataré de recrearlo para ti James.
***
-¡Kate! Está noche hay fiesta en mi casa, tienes que venir.-Te sentaste a mi lado y tu aroma a frutas se esparció.
-Niall, sabes lo especial que es mi mamá, no podré ir lo siento- Hice una mueca y seguí prestando atención a mi libro.
-¡Por favor! Sólo quiero que estés ahí, tal vez no te veré en todo el verano y te extrañaré demasiado- hiciste un puchero irresistible
-Te apuesto lo que quieras a que no has sido tú quien quiere que asista a esa fiesta si no Alex.
Y para mi mala suerte, después tuve que pagar por aquello.
-Me debes un beso, he sido yo quien quiere que vayas.- pusiste tus dedos en tu boca.
-Si claro... Espera ¿Qué? ¿Quieres que te bese? Eres un imbécil, no lo haré.
Vamos Niall sabemos perfectamente que yo anhelaba ese beso.
Me acerqué a ti y besé una de tus rosadas mejillas.
Me fui de ahí lo antes posible.
Al término de clases me sentía libre, el último día que vería estúpidas caras, el último día que no vería gente hipócrita.
Caminé hasta casa, te escuche gritar mi nombre, quise voltear y ver tus hermosos ojos, pero no lo hice porqué sé que te hubiera besado.
Niall, viene la parte entretenida.
Esa misma tarde mamá había ido al entrenamiento especial de Albert, yo como siempre ( y para evitar la fatiga) decidí quedarme en casa, aquel entrenamiento duraría 2 horas.
Algo golpeó mi ventana y debo admitir que con algo de miedo fui a ver que o quien había sido.
Ahí estabas tu, abrí rápidamente la ventana y te dejé pasar.
-¿Estas loco? Como se te ocurre trepar así por la ventana-Estaba algo histérica
>¿No deberías estar en tu fiesta?
-Se canceló, si no estás tú no tiene sentido hacer una fiesta, además necesitaba verte.
Sin decir nada más sentí tus labios en los míos, estabas besándome.
¡NIALL HORAN ESTABA BESÁNDOME!
Tarde un poco en reaccionar y después me dejé llevar.
Tu lengua comenzaba a jugar con la mía, ya no sentía que mis pies tocarán el suelo, tus manos exploraban debajo de mi camiseta mientras que mis dedos se enredaban en tu cabello, me pusiste contra la pared.
Tú pantalón comenzaba a estorbarte, tú camiseta y la mía se encontraban en el suelo como vil trapo sucio, tus manos acariciaban mis piernas y para hacer más intenso el momento, The Fray sonaba como música de fondo.
En el momento en el que me recostaste en la cama tiré todo lejos. Sólo existías tú.
Pero de un momento a otro mientras yo te acariciaba y disfrutaba de tus labios, te separaste de mi.
-Kate, sabes, espere por tanto tiempo esto.- Te miré confundida.
> Te Amo pero sinceramente me confundes.
Dime, ¿Te espero o te olvido?
Atónita, estaba atónita.
Pero descubrí algo e inmediatamente te mandé a la mierda, estabas ebrio.
Me sentía decepcionada, dolida y más que nada utilizada.
Lo único que hice fue echarte de mi casa como el animal que eras, ni si quiera me preocupó que hubieras salido sin camiseta.
Tú sabías que lo eras todo para mi, sabías cuánto te quería, sabías que no podía negarte nada y de eso tú te aprovechabas.

Illusion||N.HDonde viven las historias. Descúbrelo ahora