affection [Minsung]

Feelings

Jisung después de haber tenido sexo con aquel chico, quedó abrazando el torso del mayor, amaba aquel aroma de la colonia que usaba él, aquellos brazos fuertes los cuales lo abrazaban y acariciaban su espalda, aquellos besos en sus mejillas lo hacían sonrojar.

- Hyung! Basta, haces que me sonroje.

- Te miras muy lindo de esa manera.

El menor no pensaba lo mismo, pero si el mayor lo decía, creía una pequeña parte de eso.

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Tenía una semana exacta de haberse mudado, todo era mejor ahora, pasaba la mayor parte del día con el mayor, aunque en la oficina eran dos desconocidos.

Amaba que el mayor siempre le demostraba afecto, amaba cada cosa de él, amaba aquellos lentes de marco gris, aquellos ojos color miel, lo bien que se veía tanto en traje como en ropa casual... Era tan perfecto aquel hombre.

Pero tenía un defecto, siempre lo rodeaban chicas lindas, iban a bares y siempre había más de una que intentaba llevarlo a la cama, quererlo besar. Jisung se ponía celoso de eso, odiaba que el mayor no fuera completamente de el, aunque no eran nada, solo estaban por dinero...

- Hyung...

- Dime sung?

- usted... Me ama enserio?

El mayor dejó de ver aquellos papeles para prestarle atención a quel chico.

- ¿De que hablas sung?

- uh, bueno... Mhm, no sé si para usted sigue siendo todo sexo y ratos lindos conmigo, ¿Es más que eso para usted o solo yo siento algo diferente?

- Sung creo que ya deberías saber esa respuesta.

- No, todo es tan confuso para mí.

El mayor estaba desde algunas semanas en un debate mental, amaba a aquel chico que estaba frente a él pero a la vez amaba a una chica, aquella que había llegado a rematar con el, habían arreglado algunos asuntos y la misma le había pedido volver a tener una relación, no le dijo nada en aquel momento.

- Han, todo esto es por sexo, tu solo estás por mi dinero.

- No señor Lee, yo de verdad le tengo afecto

- Han...

- Dígame que no solo yo siento algo por usted...

El mayor iba a hablar cuando alguien tocó la puerta de su oficina, este se levantó a ver quién era, Jisung solo limpio aquellas lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos.

- Ah, señor bang, es un placer tenerlo aquí.

El menor volteó a ver, viendo a aquel hombre, rubio, con piel de porcelana, aquellos ojos color café y esos labios rojizos, se veía muy bien en aquel traje negro.

- Hola Lee, dígame, ¿Ya tiene en claro algo de lo que hablamos hace unos días?

- No, pero le prometo que pronto sabré más de ese caso.

Aquel hombre volteó a ver a Jisung, viendolo de arriba hasta abajo, sungie se sentía intimidado, aquel hombre tan elegante parecia juzgarlo.

- ¿Es tu secretario?

- Si

- Hola, un gusto mi nombre es Christopher Bang Chan.

Este extendió su mano hasta Jisung, a lo cual este respondió tomándolo de su mano.

- Un placer conocerlo señor.

Aquel hombre rubio sonrió, tenía una mirada tan intimidante, pero a la vez dulce.

- Han, sal de aquí.

Sungie volteó a ver a su jefe, a lo cual asintió, hizo una reverencia y salió de aquella sala.

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Este estaba hablando con un compañero de trabajo de algunas cuentas en mitad del pasillo, cuando sintió como una mano tocó su hombro.

- Así que te llamas Han?

- Uh, señor Bang... Mi nombre es Han Jisung.

- Lindo nombre, dime ¿A qué hora sales de aquí?

- Uh, bueno hoy salgo a las seis ¿Porque? Necesitaba algo?

- Si, quería conocerte, ¿Te parece bien?

Este se sorprendió, ¿Porqué él? Pensó por unos segundos, pero recordó aquellas palabras del mayor, no tenía nada que perder.

- Claro, señor Bang sería un placer acompañarlo.

- Bien, te veré en la sala de juntas a las seis.

- okay...

Este sonrió leve, y dejo que el mayor pasara a su lado, luego corrió hasta su oficina y suspiró leve, sentía extraño que un hombre tan lindo como el señor Bang lo invitara a un lugar.

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Las horas pasaron, la hora de salida de Jisung había llegado, este tomó su maleta y caminó hasta la sala de juntas, vió como aquel hombre al notar su presencia se despidió del señor Lee y de otros dos hombres, se acercó hasta el sonriendo.

- Vaya que eres puntual.

- No me gusta desepcionar a las personas.

Aquellos ojos cada vez dejaban de intimidar a verse con gentileza, al ver por el cristal notó aquella mirada tan oponente del señor Lee, el cual perdía el interés en lo que aquellos hombres le estaban platicando.

Regresó su mirada al mayor al escuchar su voz.

- Dime, que tipo de trago te gustaría hoy?

- uh?... Ah no tomo

- mhm... Entonces, ¿Te parece ir por un café?

- Claro, gracias.

Este dejó que el mayor colocara su mano en su espalda, volteó a ver una última vez a aquel hombre, los celos lo corcomían, tanto así que estuvo a nada de levantarse, pero no lo hizo, no haría una escena de celos, no ahora.

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Oqla, perdón x olvidarme d esta historia, pero ia 🤗

Tq a todos!