#ElChicoNuevo

Capítulo 2.

La semana pasó tranquila, todas muriendo por el tal Justin Bieber, y yo aún seguía sin entender que tanto le veían... Llegó el tan deseado viernes, y en la clase de Ciencias el Maestro Smith nos dio un anuncio.

─¡Buenos días Clase!─dijo el maestro─para seguir trabajando con la naturaleza y los seres vivos he organizado una excursión al bosque este fin de semana.
─¡Huy que divertido!─dijo Sam emocionada.
─El autobús que nos llevará sale de aquí a las 8am, por favor llegue puntuales─continuó el maestro antes de ser interrumpido por la campana de salida.

Llegué a mi casa, tomé una manzana de la cocina para subir a mi habitación a hacer mi maleta. Se hizo de noche y me dispuse a dormir.

A la mañana siguiente me desperté muy temprano, tomé una ducha y me vestí cómoda, una sudadera gris, unos shorts de mezclilla desgastados y mis Vans azules. Llegué al autobús, donde me recibió mi mejor amiga con una sonrisa. Pasamos todo el camino platicando los 3, Sam, David y yo.

─Bueno chicos, hemos llegado─dijo mi maestro luego de estar cerca de una hora en carretera.─Les asignaré un compañero de cabaña a cada uno.
─Ojalá quedemos juntas─dijimos al unísono mi amiga y yo.
─Carla y Daniela─empezó a decir el maestro─Manuel y Gerardo, Justin y David, Vanessa y Pamela, _______ y Samanta─y así continuó con el resto del grupo mientras mi amiga y yo celebrabamos y David se reía.
─¿Quedaste con Justin?─dije
─Si─respondió él.
─¿Le podrías tomar una foto a su trasero mientras se cambia y me envías?─dijo Sam.
─Estás demente─le respondió el rubio.
─Bueno chicos, vayan a sus cabañas los veo acá a la 1pm para almorzar─dijo el maestro.
─Bueno chicas me voy─dijo David.
─Chao─dijimos al unísono mientras nos dirigíamos a nuestra cabaña.

─¿Es esta?─dijo Sam.
─Si, entremos─dije yo.
─Está rico acá adentro, mira los pájaros─dijo mientras señalaba un árbol frente a la cabaña.
─Si, es lindo, pero apúrate hay que desempacar─dije sacando las cosas de mi maleta─¿qué te parece si cuando acabemos vamos a dar una vuelta?
─Si, para conocer el lugar.

Terminamos de ordenar todo rapidísimo, y salimos un rato.

─Mira ahí hay un río─dije
─¡Vamos!─dijo Sam, nos acercamos al río y metimos los pies.
─¡Hey chicas! ¿Qué hacen ahí?─volteamos y era David, pero no venía sólo estaba acompañado de ¡Justin!.