🧷 O4. extra

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—¿Crees que va a querer escucharme? —preguntó al chico a su lado.

—Por supuesto, Jay-ssi es un buen chico —sonrió.

HeeSeung no se mostró muy seguro, sin embargo, ya había llegado hasta allí y no era el momento de echarse hacia atrás. Además, recibiría una buena paliza si no iba y se disculpaba de una vez.

Habían pasado un par de semanas desde la salida de Jay de la pandilla. Tuvo el tiempo de enfriar su cabeza y darse cuenta de que lo que hizo fue estúpido. Y que en realidad no odiaba a JungWon, todo lo contrario, estaba feliz que él fuese el novio de su mejor amigo porque lo hacía muy feliz. Es sólo que... HeeSeung era bastante impulsivo.

—¿Sabes? Tal vez debería regresar otro día, él está trabajando y...

—¡Lee HeeSeung! —exclamó y jaló su oreja para después susurrar—: Si no vas y te disculpas, la próxima vez que me beses te arrancaré la lengua.

El chico lo miró con pánico y de manera automática se cubrió la boca con la mano. Asintió logrando que el otro sonriera.

—Ahora ve.

—¿No vienes conmigo? —HeeSeung puchereó.

Negó.

—No pueden vernos juntos, se supone que somos enemigos ¿recuerdas?

Chaqueó la lengua. Lo recordaba y le fastidiaba. Pero si no quería problemas entonces debían mantenerse en las sombras. Así que con resignación, comenzó a caminar hacia la cafetería donde ahora trabajaba Jay.

Cuando entró, fue recibido por un 'bienvenido' de parte de los empleados. Jay atendía una mesa del fondo, pero antes de que pudiera acercarse, un pelinegro le cortó el camino. Instintivamente dio un paso hacia atrás.

—¿Qué quieres? ¿La paliza de la última vez no fue suficiente?

HeeSeung tuvo un escalofrío. El golpe le dolió, sí, pero su patada era peor y definitivamente no quería volver a vivirlo. Yang JungWon era tan tierno como peligroso.

—Yo sólo quería hablar con él... ¡Con ambos! Es decir, no vine por problemas... Solo vine a hablar.

JungWon levantó una ceja y lo miró de arriba abajo. Parece que estuvo a punto de mandarlo a la mierda pero terminó suspirando y asintió.

—Siéntate ahí, ordena un americano o lo que sea y espera hasta nuestro descanso. Si veo que intentas algo estúpido, está vez saldrás de aquí en una ambulancia. —El chico se fue, apuntándolo con dos de sus dedos y con sus ojos entrecerrados.

Sin más que hacer, Heeseung fue y se sentó. Esperó a los chicos durante unos minutos, prefirió un vaso de agua, no se sentía capaz de consumir otra cosa sin terminar vomitando. Pero ni siquiera hizo falta, cuando ambos chicos se sentaron frente a él, todo su estómago se revolvió.

—Hey Jungwon, no sabía que también trabajabas aquí —soltó una risa nerviosa, aunque solo gano un ceño fruncido por parte del nombrado—. Parece un buen lugar, esta agua está muy buena.

Jay suspiró.

—Por Dios Heeseung, solo di a que vienes.

El chico se mordió el labio. Tenía razón, ¿qué diablos estaba diciendo? Parecía un tonto. Tomó una profunda respiración para tener el coraje de decir lo siguiente.

—Yo... Estoy aquí para disculparme con ambos por la forma en la que actúe con la noticia de que Jay se iba —con las primeras palabras, el resto fluyó con más facilidad. Apretó el vaso entre sus manos y continuó—: Sé que tengo un problema con mis reacciones exageradas. Simplemente me tomó por sorpresa, ¿sabes? Estar contigo en la pandilla era de mis cosas favoritas, era divertido ir por ahí haciendo estupideces y eso. Cuando conociste a Jungwon no me sentí celoso ni nada, ¡estaba muy feliz por ti! Se que me dejo llevar muy fácil por mis emociones y que eso se traduce en mi golpeando a alguien. Lamento mucho eso Jungwon, no tengo excusas, fui un idiota total y estoy trabajando en eso.

—Definitivamente tienes un problema por golpear gente —dijo Jungwon, acusándolo con un dedo.

Eso le hizo recordar el día en que Jay le dio la noticia, también se había vuelto loco y pelearon. En realidad no le había prestado demasiada atención, ellos solían pelearse con frecuencia. Pero una voz en su cabeza le dijo que esas peleas habían sido en broma, como una simple diversión. Aquella noche ninguno de los dos se estaba riendo. Esta vez levantó la mirada para encontrarse con la de su mejor amigo, o al menos esperaba que aún lo fuera.

—También quiero disculparme contigo Jay, no solo por lo que le hice a tu novio, sino también por lo de esa noche.

—¿Noche? —Jungwon volteó a ver a Jay quien había palidecido—. ¿Cuál noche Park Jongseong?

Con una sola mirada, Heeseung supo que no le había dicho nada a Jungwon sobre su pelea. Rápidamente trató de arreglar la situación.

—¡No fue nada! La semana pasada cuando me contó que se iría discutimos un poco, le dije algunas palabras hirientes y... eso.

Ah, pero Jungwon no era ningún tonto. No tardó en conectar los hilos de la situación.

—¿La semana pasada? Un momento, ¿fuiste tú quien lo golpeó esa vez? —preguntó esta vez a Heeseung.

—¿Qué? Yo nunca dije eso.

—¿Conociendo tu historial y sigues creyendo que me voy a creer el cuento de que solo discutieron? Agarrénme que ahora si lo mato.

Jungwon se levantó y el pobre chico no pudo hacer más que rezar al de arriba, aunque tenía su "historial" sabía que jamás le ganaría a Yang Jungwon en una pelea. Afortunadamente, Jay lo detuvo antes de que enserio corriera sangre.

—Bebé espera, no puedes hacer eso frente a los otros clientes.

¿Osea que si podía en un lugar más privado? Heeseung quería llorar.

—Enserio lo siento mucho. Sé que soy un imbécil, pero si estoy aquí es porque a pesar de todo sigo queriendo a mi mejor amigo. Mis acciones no tienen excusa y se que pido mucho al desear que me perdonen, solo... no quería seguir sin haberles dado una merecida disculpa. Yo... supongo que es todo, ya no los molesto en su turno.

Sin más que decir, Heeseung se levantó, dejando un poco de dinero sobre la mesa. Se despidió una última vez con la mano y salió de aquel lugar. Una vez afuera, sintió que un peso se había ido de sus hombros. Solo esperaba que aún tuviese una oportunidad de recuperar a su mejor amigo y a iniciar de nuevo con Jungwon. Esta vez quería hacer las cosas bien.

Antes de que pudiera irse, un llamado familiar lo detuvo.

—¡Hee, espera!

Se giró, encontrándose con la sonrisa de Jay. Eso es una buena señal, ¿cierto?

—¿Sucede algo?

Cuando llegó a su lado, Jay posó una mano sobre el hombro contrario, todavía sonriendo.

—Quiero darte las gracias, por haber venido a disculparte con nosotros.

Heeseung hizo una mueca.

—Ni siquiera creo que me las merezca.

—Hee, sé que no eres un mal chico a pesar de todo. Haz sido mi mejor amigo por años, una de las pocas personas en las que podía confiar y que sabía que estarían ahí para apoyarme —hizo una pausa—. Escucha, yo también he hecho locuras. Aunque nunca llegué al punto de querer golpear a la pareja de mi mejor amigo.

El mayor sintió una punzada de culpabilidad por sus palabras pero lo dejó continuar.

—Muchos otros ni siquiera tendrían la valentía de disculparse, mucho menos intentar cambiar. Se que fuiste sincero en lo que dijiste. Eres mi mejor amigo después de todo, ¿no?

Sin resistirse más, rodeó a Jay en un abrazo rápido.

—Enserio no te merezco. Por supuesto que eres mi mejor amigo, idiota.

Entonces una tercera voz se unió.

—¡Que te hayamos perdonado no significa que no te estaré vigilando Lee Heeseung!

Soltó una risa y le asintió a Jungwon, sabiendo que hablaba enserio.

—Me esforzaré.

Cundo recibió una sonrisa de Jungwon, sabía que a partir de ese momento todo iría por buen camino, o al menos eso creía.

♡ criminal love ; jaywonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora