Leirum fue la primera ley creada por Dios la primera mujer la llamada Lilith y la única que podía dar fin a la batalla de padre e hijo pero para ello Leirum debía sacrificar su vida para poder acceder al reino de los sueños, dónde tendría control de su amado y de su creador. Pero para ello debía dejar a sus hijos pequeños y desamparados, si no lo hacía el caos y el fin vendrían como en los sueños que manifestaba cuando dormía.