AllxCypher (One-shot's)

(1) Reemplazo [SxC]

Sova y Cypher mantuvieron una relación a la sombra de los demás, la cual tuvo que romperse, pero no por haber sido descubiertos, sino, porque el ruso ya no sentía la misma química que una vez tuvieron. Decidieron quedar como amigos, para que de esa forma, la convivencia fuera una molestia y pudieran realizar las misiones en conjunto sin ningún tipo de problema.

Cypher aun sentía amor por él, pero no podía quedarse a su lado, no quería obligarlo a permanecer juntos, demandar que amara a quien le hizo daño una vez.

El marroquí y el ruso tuvieron complicaciones durante su tiempo juntos, todas causadas por Cypher, pero era simplemente inevitable a él, era parte de su personalidad. Cypher llegaba tarde al complejo habitacional, se aislaba de forma constante: sin salir durante días de su taller. Pocas veces se tomaba el tiempo de compartir momentos con Sasha, ya sea a causa de su "trabajo" (el cual nunca le dijo de qué se trataba) o por las misiones. Tuvieron sus cosas buenas, pero Sasha no lograba sentirse amado en su totalidad.

◜⭒⋆꙳⭑◞

Durante la mañana se mantuvo ocupado en su taller hasta que llegara la tarde, horario en que se llevaría a cabo una misión entre él y Sasha. En su interior maldecía al universo por ponerse en su contra, ya que aún se sentía incómodo por los acontecimientos pasados, pero no tenía remedio: las órdenes de Brim se tenían que cumplir al pie de la letra.

― Bueno muchachos, hoy les toca a ustedes dos, sé que hacen buena sinergia y trabajan perfecto juntos, así que tengo fe en que esta misión saldrá bien ― Brim dio una palmada a ambos hombres, dándoles permiso para que se retiraran de la oficina. Cypher solo suspiró para sí mismo y siguió desde atrás a su compañero, caminando "juntos" hacia el hangar.

Al llegar se colocaron su respectivo equipamiento, armas de fuego, el arco indispensable de Sova, los miles de cuchillos que Cypher ocultaba bajo su saco y las pequeñas pistolas de mano que escondía en los compartimentos de sus piernas. Una vez listos subieron al helicóptero, partieron junto a Omen, quien se encontraría en la gran ave como refuerzo si algo salía mal.

Una vez aterrizaron, las hermosas palabras de Omen no faltaron. ― No mueran allí, no antes de que yo los asesine a ustedes primero ― Dijo el espectro con voz grave. ― Yo también te quiero Omensito ― Soltó Cypher entre bajas risas. ― No me vuelvas a llamar así si no quieres ver la luz del día otra vez, cámara con patas ― Cypher solo lo ignoró y siguió a Sasha, quien había tomado la iniciativa de ir adelante, ignorando la pequeña y absurda discusión del par.

― ¿Cómo quieres a Omen exactamente? ― Cypher arrugó el entrecejo ante la pregunta inesperada del ruso. ― No dije nada, olvídalo... ― Sova sacudió la cabeza, negando lo anterior dicho. El marroquí tampoco dijo algo, continuando con su camino.

Al llegar al lugar no vieron nada, esto preocupó un poco al ruso. ― Nos posicionamos en el lugar correcto... ¿Por qué no hay nadie allí? Brim dijo que abajo estaría el grupo con cargamentos de radianita ilegal, enton- ― Antes de poder terminar, una gran explosión ocurrió a sus espaldas, luego, todo ya era borroso. Había quedado inconsciente.

Al momento de despertar, el dolor golpeó su cuerpo, trayéndolo a la realidad. Sin saber dónde se encontraba, se paró de la cama donde se encontraba acostado y revisó la blanca e iluminada habitación. Mientras intentaba mantenerse de pie, un gran monitor colgado de una de las paredes se encendió, mostrando la imagen de Sasha sentado en una silla, inconsciente y con graves lesiones exteriores, ni imaginar de las interiores. ― ¡Deja que reciba atención médica! De lo contrario morirá... ― Gritó un alterado Cypher, buscando la cámara que se encontraba en la habitación.

― Que reciba atención médica es decisión tuya, Aamir El Amari ― Soltó la voz tras el monitor, riendo a lo último. ― ¿A qué te refieres exactamente? ― Arrugó las cejas, claramente enojado. ― Te propongo un trato... Tú conseguirás información de una persona y yo me encargaré de que tu indefenso ex reciba tratamiento ― El hombre tras el monitor sabía mucho, incluso su nombre real. Tenía que tener cuidado. ― Acepto ― Dijo Cypher sin pensarlo dos veces, esto no sorprendió al raptor, al contrario, provocó que se riera.