Un Umbreon Shiny muy reservado [Eeveelution Squad]

Capítulo 0: Prólogo (Corto)

En lo profundo del oscuro bosque nocturno, un Umbreon Shiny descansaba al pie de un árbol, en su cuerpo eran muy visibles la enorme cantidad de cortes profundos que lentamente dejaban de sangran, y muchos magullones, más de los que se podrían contar con los dedos de ambas patas, siendo que la más profunda y casi mortal herida se encontraba al costado derecho de su cuello, ya estando levemente cicatrizada y ligeramente sangrante, cubierta por una bufanda roja en extremadamente malas condiciones.

Él estaba completamente agotado y sumamente adolorido por la fiera batalla que terminó hace poco en contra de un enorme Pokémon que atentaba contra su propia vida. Este Umbreon apenas tenía 12 años de edad y tuvo que matar para poder sobrevivir, y para poder vengarse de la perdida de sus únicos familiares en esta vida, siendo su única opción la evolución forzada para llevar a cabo esos ideales en contra de aquel Pokémon que le arrebató todo lo que tenía.

Hace pocas horas atrás, ese Pokémon identificado como Rhydon había sido casi derrotado por el padre y el tío del Tipo Siniestro. Así que fingiendo estar inconsciente, hizo que ambos Pokémon bajaran la guardia y se unieran a la madre y al anterior Eevee Shiny a intentar quitar los grandes trozos de madera caída que bloqueaban la entrada a su hogar con la intención de buscar y sacar algo del interior con desespero, solo para que algo tarde, escucharan los pesados pasos veloces del Rhydon en su dirección, El padre del Umbreon Shiny solo tuvo la poca reacción de empujar a su hijo fuera de la trayectoria de embestida, haciendo que se salvara, pero de que visualizara una de las peores escenas en su vida.

El padre terminó siendo brutalmente atravesado en el pecho por el cuerno del Pokémon Taladro, siguiendo después el tío, quien terminó partido en dos y dejando en el suelo y sus alrededores grandes cantidades de sangre y órganos vitales inservibles, y con la madre sucedió el caso que, al estar más separada de estos últimos, solo fue lanzada e impactada contra el enorme arbol que era antes su hogar, pero a cambio de eso, una de sus patas traseras fue casi completamente arrancada de su cuerpo, siendo escasamente lo que la unían a su cuerpo unos pequeños ligamentos y pedazos de piel y carne, para empezar a formar debajo de sí un gran charco de sangre.

El Umbreon Shiny en su estado base evolutivo, consumido por la tristeza, el odio puro y la ira, se enfrentó contra el gran Pokémon con todo lo que podía, provocándole bastante daño, pero resultando en casi su muerte por precipitarse en muchas ocasiones, dando como resultado la cantidad de cortes y golpes en su cuerpo, y el casi mortal corte de su cuello. Negándose a morir si antes haber cobrado su venganza, su cuerpo resplandeció en grandes brillos en blanco y azul, dando como resultado su evolución en Umbreon, y en la mediana cicatrización de gran parte de sus cortes, incluida la de su cuello.

Luego de obtener ese impulso de poder que necesitaba, logró destruirle la cabeza entera a su contrincante, para poco después caer inconsciente. Su perdida de consciencia no duró más de 10 minutos, dando como resultado el arrastrarse hasta el árbol más cercano y esperar a recuperar fuerzas, sin saber que algo se adentró en su cuerpo mientras estaba desmayado. Ya pasado un corto tiempo en donde logró recuperar las suficientes fuerzas como para caminar, recobrar el aliento y dejar que sus heridas reposaran, caminó de manera temblorosa y torpe hasta llegar a los cadáveres de sus familiares.

Al verlos en tal estado, cayó arrodillado frente a ellos sin importale si se ensuciaba con la sangre, y un mar de lágrimas de tristeza y dolor puro comenzaron a derramarse de sus ojos de manera incontrolable y sin aparentemente fin, no fue hasta 20 minutos después de estar llorando que se detuvo al recordar la razón de por qué querían quitar desesperadamente los obstáculos de la entrada de su hogar, y aunque le dolía mucho no poder enterrarlos como es debido, debía de saber que pasó. Así que volviéndose a levantar y pidiendo el más sincero y dolido perdón, caminó nuevamente en su estado deplorable hacia lo que parecía una entrada hacia el gran árbol, cuya entrada estaba bloqueada por gruesas ramas que cayeron ahí, que por la última embestida del Rhydon estaban quebradas por la mitad y lo suficientemente pesadas como para poder arrastrarlas un poco.