Llaves...

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Ese mismo día, después de la escuela, MeYer y Demon llegaron algo empapados a la casa de Demon. Iban a despedirse, pero hubo un contratiempo, MeYer se olvidó las llaves de su casa, y sus padres estaban en un viaje de negocios..

MeYer - "Mierda.. He perdido las llaves de mi casa, y mis padres están en un viaje de negocios"

Dijo empapado una vez Demon ya estaba dentro del porche de la casa.

Demon - "¿A qué te refieres?"

MeYer - "Me refiero a que si puedo quedarme en tu casa para esta noche, o al menos hasta que vuelvan mis padres del viaje de negocios.."

Dijo MeYer algo tímido y avergonzado, nunca le había pasado algo como esto, y no quería incomodar a Demon con aquello.

Demon - "Ah.. es eso, claro, no te preocupes, entra anda y sécate, mis padres también están en un viaje de negocios, así que no vendrán en un tiempo."

MeYer le agradeció con toda su alma aquella bonita acción, una vez dentro de la casa, y haberse secado un poco la ropa, Demon dijo.

Demon - "Voy a ducharme, después de que salga si quieres te duchas tú"

MeYer asintió, y mientras Demon se duchaba, el se quedó callado mirando su móvil, esperando a que el otro terminase para poder meterse el dentro y lavarse, ya que estaba algo mojado aún, y le incomodaba.

Un veinte minutos después, Demon salió de la ducha, con únicamente una toalla blanca puesta en su cintura. Aún estaba mojado por la ducha, y tenía el pelo hacia abajo tapándole algo la cara.

Demon - "He terminado, me secaré en mi habitación, aparte tienes otra toalla cerca de la ducha para secarte"

MeYer aún no se había girado para verle, pero una vez lo hizo, se quedó atónito por el buen cuerpo que tenía alguien de un curso menor a él. Aún que solo se sacaban dos años, le parecía raro.
Una vez este se levantó para irse a duchar mirando al suelo y suspirando, se chocó con Demon, que aún no se había movido de la puerta del baño y casi se le cae la toalla por eso.

MeYer - "¿Que haces? Quiero pasar a ducharme, aún estoy mojado de la lluvia."

Dijo el, pero Demon no respondió, solo se inclinó, puso una mano en el hombre de MeYer, que era unos diez centimetros más alto que el, y me hizo a un lado para poder pasar el.

MeYer se extrañó por esta acción, pero lo dejo pasar y se fue a duchar algo más tranquilo. Al salir de la ducha, MeYer se puso la toalla al rededor de la cintura, era algo pequeña para su cuerpo por lo que no le cubría entero, pero aún así, consiguió colocársela para que no se le viera mucho de la "V".

Después de unos treinta minutos intentando secarse el pelo, y desenredarse, entro Demon al baño sin avisar.

Demon - "¿Que haces así todavía? Llevas aqui una hora y media. No me digas que no puedes desenredarlo."

MeYer no respondió, solo giro su cabeza a un lado y le dio el peine a Demon algo frustrado, ya que el solo no podía darse en la parte de atrás del pelo, que era lo único que le faltaba por desenredar para poder salir del baño y cambiarse.

MeYer - "Porfavor, desenredalo tú, que yo no llego, y si llego me tira demasiado."

Dijo este algo sonrojado, no podía creer que le estaba pidiendo este favor a Demon, un chico dos años menos que el, que ni siquiera le llegaba a mitad del pecho.

Demon - "Está bien, pero siéntate por qué no llego."

MeYer se sentó en una banqueta que había por el baño, y después de unos cinco minutos quejándose de vez en cuando por los tirones termino.

MeYer - "Menos mal.. Pero ahora la pregunta es que narices me voy a poner, no tengo ropa, nada más que el uniforme."

Demon accedió a darle parte de su ropa por el resto de tiempo que se quedase en su casa. Tras pasar unas cuantas horas hasta la cena, MeYer accedió a hacerla el, ya que aún que fuese un chicho con dinero, sabía cocinar, no perfectamente, pero sabía.

Después de la cena, lo único que quedaba era dormir, y al día siguiente volver a lo mismo.. pero el problema eran las camas ¿Cómo dormirían?.

MeYer - "¿Y como dormiremos..?"

Demon - " Debemos dormir en mi habitación los dos... Ya que la habitación de mis padres está cerrada con llave siempre que se van de viaje, así que, espero que no te importe."

Vibras de Gato NegroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora