El aire gélido se le filtraba por todos lados, incluso ni esa gruesa chaqueta era capaz de protegerla de aquella ventisca, corrió el poco camino que le quedaba para llegar al instituto. Ella iba constantemente al lugar mencionado, estaba acostumbrada a que ni bien llegue una sonriente Isabelle Lighwood la recibiera en la puerta, lanzándose hacia ella con un abrazo, después la agarraba fuertemente de la muñeca y la conducía por los pasillos hacia su habitación.
Había mucha gente en el instituto, más de lo normal, la pelinegra le explico que era porque hace unas horas, se había llevado a cabo una: "súper importante, situación de vida o muerte" reunión imprevista del consejo sobre que hacer con el caso de Sebastian, que prácticamente se había esfumado, y sobre la situación de Jace, al decir eso se le borro la sonrisa del rostro y a Clary le inundo la culpa. Ese sentimiento tan fastidioso que la perseguía todas las mañanas cuando abría los ojos y todas las noches cuando los cerraba. Esa sensación que le invadía el pecho, no importaba cuantas veces los demás le repitiera que no se preocupe por Jace, que despertaría en cualquier momento o que no era su culpa.
Clary decidió enfocarse en otra cosa, habían llegado al cuarto de Isabelle, quien había comenzado a parlotear sobre ropa, estaba naufragando en el mar de sus pensamientos que ni se dio cuenta de que Isabelle había dejado de hablar y había comenzado a mirarla expectante.
-¿Clary? Ohhh! Clarissa! Deja de soñar despierta...¿me estas escuchando?
-¿Que? Si, si seguro Izzy...¿Que me decías?
Isabelle todo los ojos diciéndole que quería bajar a comer algo y si la acompañaba o prefería quedarse, Clary asintió distraídamente, Isabelle volvió a rodar los ojos y la llevo a rastras hacia la cocina.
Mientas bajaban la larga escalera,Clary se pregunto cuándo podría ver a Jace, era una pregunta que se hacía muy a menudo, según le había contado Izzy, Jace se encontraba en una habitación, casi siempre acompañado de los hermanos silenciosos ,los cuales había conseguido quitarle todo el fuego celestial de las venas, pero dejándolo muy débil y, lo que ni le gustaba nada a Clary era que no dejaban que nadie se acercase a él bajo ninguna circunstancia.
Sebastian. Otro tema que surcaba el mar de sus pensamientos. Hace días que no había nada de qué preocuparse en el mundo de las sombras, ningún demonio detectado, ni una sola emergencia, cero alarmas, conclusión: todo era mas tranquilo pero al mismo tiempo sospechoso, nadie puso ninguna objeción al te,a, se conformaban con que todo estuviese en completo orden...hasta el momento.
Clary no se dio cuenta en el momento que terminaron de bajar, ni cuando se habían sentado e Isabelle había comenzado a prepararse un sándwich y darle la mitad.
-¿Clary...en que piensas?-le pregunto Isabelle con preocupación, tras haberse dado cuenta de que la pelirroja tenía la mirada perdida en el tacho de basura.
-Emm...nada-le respondió titubeando, rogó al ángel por que no se haya dado cuenta...pero fue demasiado tarde, la pelinegra le lanzo otra mirada de interrogación y no tuvo otra opción que responderle-yo...bueno...yo pensaba en ...-suspiró-yo pensaba en Jace
Isabelle le lanzo una mirada de lastima y se sentó a su lado, la sujeto por los hombros y con toda sinceridad le dijo:
-No es tu culpa, tu lo salvaste separándolo de ese bastardo -suspiró-y va a estar bien,tú lo estarás, todos lo estaremos.
-Pero y ¿si el vuelve?-preguntó con preocupación Clary
-No sirve de nada que te diga que no lo hará, tu también leíste la nota- hace unos días Maryse había mostrado la nota que dejó su hermano, lo cual solo sirvió para preocupar mas a Clary - pero te prometo que no dejare que te ponga un dedo encima.
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-¿Por qué?-Porque te amo
RomanceDespués de que Clary atravesara con Gloriosa a Jace y dejándolo herido, Sebastian no pierde el tiempo y vuelve con un nuevo ejército, el cual todos creían que estaba destruido, para llevarse lo que es suyo. Se sitúa días después de la batalla del Bu...