Al fin en casa.

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Los padres de Gustabo firmaron los papeles del alta para por fin poder llevarse a su hijo a casa, Gustabo estaba muy emocionado de por fin poder regresar a su hogar después de un mes y medio, al fin podría ver a sus amigos todos los días.

El tenía muy claro que al estar en casa seguiría viviendo un proceso bastante largo y difícil o doloroso. Tenía que enfrentarse a las sesiones de terapia con su psicóloga, tenía que regresar a la escuela después de varias semanas y sobre todo, sabía que tendría que enfrentarse a Jack en el juicio, tendría que verle la cara a ese animal que le jodió la vida por mucho tiempo, eso era lo que más miedo le daba, volver a estar cerca de él, eso lo tenía bastante perdido en su burbuja de pensamientos hasta que su madre explotó esa burbuja.

MG: Vale, ya está todo listo y hoy mismo nos iremos a casa mi niño. - Dijo con una gran sonrisa. -

V: Me alegra demasiado poder ver que al fin vas a casa Gus, de verdad estoy muy orgulloso de ti, te mereces lo mejor del mundo. - Le sonreía tranquilamente al rubio, sabía que estaba asustado, podía notarlo en su mirada pero también podía notar la emoción de poder salir del hospital. -

PG: Subiré tus cosas al auto, vendré por ustedes y al fin nos iremos a casa Gus. - Avisó antes de salir de la habitación. -

G: No se imaginan lo emocionado que estoy, siento que será un poco extraño dejar el lugar que fue mi hogar por casi dos meses, aunque no estuviera conciente de que pasaba, sabía que estaba aquí. - Suspiró y miró a las dos personas que estaban con él. - Pero lo importante es que al fin podré estar en casa, sin horario de visitas, sin la comida fea de hospital y sin que me estén monitoreando cada dos segundos. - Rió y se levantó de la cama. -

MG: Horacio está en casa, te está preparando una sorpresa.

G: ¿Una sorpresa? Yo amo las sorpresas. - Abrazó a su madre y cerró los ojos cuando el abrazo fue correspondido. -

V: Por eso te está preparando una, fue con la ayuda de todos tus amigos, de tus padres y de los míos.

G: Ya quiero irme, estoy ansioso por ver mi sorpresa. ¿Cuánto tiempo tardará papá? - Preguntó con curiosidad. -

MG: No debe tardar, solo subiría una maleta pequeña al auto, seguro ya viene.

Cuando la señora García terminó de hablar escucharon unos golpes en la puerta, era obvio que no era su padre porque no hubiera tocado la puerta. Gustabo se apartó de su madre y abrió la puerta encontrando al padre de Jack.

Inmediatamente comenzó a ponerse nervioso, sin saber que hacer o que decir.

PC: Gustabo.. ¿Puedo pasar? - Preguntó con voz baja. -

Viktor escuchó la voz e inmediatamente se acercó a la puerta y se puso frente a Gustabo, mirando fijamente al padre de Jack.

V: ¿Qué es lo que hace aquí? ¿Realmente tiene el descaro de venir aquí después de lo que hizo su hijo? - Solo con escuchar su voz podías notar que estaba sumamente molesto y ni hablar de la cara que tenía. -

PC: Viktor, esto no es de tu incumbencia, sabes que siempre te he mirado como un hijo, pero no tienes nada que ver aquí, vengo a hablar con Gustabo.

Al escuchar esto, la madre de Gustabo reconoció la voz y rápidamente se acercó a ellos.

MG: Viktor, sienta a Gus en la cama por favor, yo hablaré afuera con el señor. - Viktor asintió y apartó a Gustabo de la puerta para llevarlo a la cama, este parecía estar perdido en sus pensamientos pues no hacía absolutamente nada. -

La señora García salió de la habitación para hablar con el señor Conway.

MG: Dime. ¿Qué es lo que haces aquí? ¿Para qué vienes a buscar a mi hijo? No hablarás con él, es menor de edad y no te permitiremos hablar con él a solas, si quieres hablar con él será con nuestro abogado presente, ni tu hijo ni tú pueden acercarse a Gustabo ni a nadie de mi familia, así que vete de aquí, no quiero verte cerca de nosotros hasta el juicio. - Su voz era entrecortada, se notaban las ganas de llorar y de golpear a ese sujeto justo en la cara, pero sabía que eso era algo en su contra, solo por eso se contuvo. -

PC: Yo venía a hablar tranquilamente con tu hijo pero está bien, quiero recibir el mensaje de tu abogado para poder hablar con Gustabo, no tengo problema en hablar frente a uno. - Sin decir nada más se dió la vuelta y caminó hacia la salida del hospital. -

Después de eso entró nuevamente a la habitación donde se encontró a Gustabo llorando mientras Viktor lo abrazaba, se acercó a él y trató de calmarlo. Después de calmarse acordaron no mencionarle nada a su padre ya que podía irse a la violencia física y eso solo les daría cosas en su contra, unos minutos después llegó su padre diciendo que por fin podían irse y no tardaron ni cinco minutos en salir de ese lugar para regresar a casa.

En el camino todos iban riendo y bromeando de cualquier cosa. Al llegar a casa Gustabo miró la camioneta de los padres de Viktor estacionada fuera de su casa, cosa que le alegró mucho, bajaron del auto y Gustabo entró siendo recibido por Alexandra, la hermana pequeña de Viktor a la cual abrazó rápidamente mientras recibía leves sollozos de la niña.

G: Hey no llores peque, estoy bien, estoy aquí contigo y así será siempre mi niña...

A: Es que.. yo tuve mucho miedo de que te pasara algo Gus, eres como mi hermano y yo te quiero mucho... - Hablaba bajito pues se sentía muy triste. -

G: Lo sé Ale, lo sé pero estoy bien, estoy aquí abrazándote peque.

La pequeña asintió y se separó de el para que pudiera ver a su hermano mayor. Horacio se acercó caminando lento, aún se sentía culpable pero él no importaba ahora, lo importante para él era su hermano pequeño.

G: Ven aquí y abrazame, que tengo ganas de tus abrazos. - Sonrió y abrió los brazos, Horacio lo abrazó y ambos pudieron sentir un poco de tranquilidad. -

H: Me da mucho gusto verte aquí en casa, enano.

G: Hey no soy enano, tú eres muy alto.

Después de eso los padres de Viktor se acercaron a él para abrazarlo y hablar un poco. Pasaron el resto del día poniendo al corriente a Gustabo sobre chismes escolares, novedades en ambos hogares y jugando algunos juegos de mesa.

Gustabo se sentía feliz de estar nuevamente en su casa, con todos los peluches nuevos y con algunas de las personas que más quería.

Gustabo se sentía feliz de estar nuevamente en su casa, con todos los peluches nuevos y con algunas de las personas que más quería

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⏰ Última actualización: May 17 ⏰

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