jiujiu no está

capitulo 2: 5 Días

⚠️ADVERTENCIA: descripciones de violencia y sangre, además de que Wen Chao es un mf espeluznante.⚠️

Xichen yacía acurrucado en su cama -su cama- agarrando el anillo de Jiang Cheng con tanta fuerza que sabía que le dejaría una marca. En algún momento, Wangji le había limpiado la sangre, pero no recordaba cuándo había sido, ni le importaba. El mechón de pelo, la hermosa cabellera negra de A-Cheng, descansaba suavemente sobre la mesilla de noche. Como si no contuviera el conocimiento de su marido desaparecido, un conocimiento que necesitaba desesperadamente. Como si fuera un mechón de pelo normal.

La policía le permitió conservar el anillo (sospechaba que Wei Wuxian tenía algo que ver con eso) en lugar de guardarlo como prueba, aunque dudaban. Pero no había huellas dactilares, ni rastros, ni nada . Y eso que buscaron muy a fondo. Por suerte, todos en la comisaría estaban deseosos de ayudar a Wuxian, y todo lo que se podía hacer avanzaba rápidamente. Sin embargo, no tenían más pistas que la nota y una vaga descripción del misterioso cliente. Las cámaras de seguridad no habían captado nada; el hombre parecía bastante hábil para evitarlas.

Wangji y Wuxian le dijeron que durmiera. Querían que durmiera. ¿Pero cómo iba a hacerlo? Ya han pasado 8 horas desde que se entregó la carta. 10 desde que Jin Ling y MianMian vieron por última vez a su amada. ¿Qué le estaban haciendo a A-Cheng? Obviamente estaba sangrando, pero ¿por qué? ¿Cuánto sangraba? ¿Había alguien ayudándole? ¿Alguien? Se acurrucó aún más, metiendo las rodillas bajo la barbilla.

Llamaron a la puerta; Xichen ni siquiera se molestó en contestar. Sorprendentemente, entró Jiang Yanli, jugando nerviosamente con su suave cabello. Aunque adoraba a su cuñada, no habían hablado demasiado, ambos estaban muy ocupados. Mantuvo el contacto visual durante un segundo y luego volvió la mirada a la pared, sin encontrar la energía para ofrecer una sonrisa, aunque fuera pequeña, como hacía habitualmente.

Se acercó a la cama y el colchón se hundió un poco cuando se sentó. Yanli apoyó su pequeña mano sobre las grandes manos de Xichen. El gesto fue pequeño, pero con él floreció calor en su pecho. No pudo contener las lágrimas.

"¿Qué voy a hacer?"

Cada palabra estaba impregnada de desesperación. La desesperación de lo desconocido. La desesperación de la angustia. Xichen sentía que iba a romperse en cualquier momento... pero no. No podía. Tenía que estar allí cuando llevaran a A-Cheng a casa.

Tenía que estar allí.

Xichen la miró a los ojos marrones llorosos.

"Por favor. Tienen que dejarme ayudar. No puedo estar aquí sin él, Yanli".

Ella asintió sin decir palabra, todavía agarrada a su mano mientras él se levantaba de la cama.

En el salón, Wei Wuxian mantenía una conversación telefónica en voz baja mientras Wangji observaba. Su hermano pequeño estaba en la entrada, empezando a protestar.

"Ge..."

Xichen levantó una mano y le dirigió una mirada seria y decidida.

"Por favor, Wangji. Voy a perder la cabeza ahí dentro. Tienes que dejarme ayudar. Necesito ayudar".

Se apartó de Jiang Yanli y cogió la mano de su hermano con la suya.

"Ponte en mi lugar, Wangji. No puedo quedarme aquí sentado".

Wangji miró a Wuxian, que seguía al teléfono en un rincón, y luego a su hermano. Asintió con la cabeza. El alivio corrió por las venas de Xichen, que incluso esbozó una pequeña sonrisa.

"Gracias.

"Pero debes descansar", añadió Wangji.

"No podré descansar. No hasta que Wanyin esté en casa y a salvo", respondió en voz baja, haciendo girar la alianza de oro con los dedos.