Naruto el dolor de una traición: Un Otsutsuki de sangre pura

Capítulo III: La traición

Todo comenzaría en un claro y hermoso día en la aldea de la hoja, se puede ver a nuestro rubio protagonista favorito caminando tranquilamente ignorando las completas miradas de odio puro dirigidas hacia el, pese a que eso le afectaba mentalmente el día de hoy decidiría no tomarles importancia alguna a esos odiosos aldeanos, sino que teniendo un solo objetivo en mente se dirigiría al recinto Uchiha en busca de solo dos cosas, la primera era visitar a su hermano Itachi Uchiha y la segunda invitar a salir a su novia Kiyomi Uchiha que tenía su misma edad y que conoció hace unos cuantos años atrás tras verla sentada en el muelle de un lago de la residencia a lo que su parecer era entrenando un jutsu de bola de fuego ya que quería alcanzar a su hermano y para eso debería esforzarse al máximo, tras haberla conocido y hacerse muy buenos amigos con el tiempo y posteriormente Naruto le pediría que fuese su novia a lo que Kiyomi aceptaría muy gustosamente, pero sin embargo cuando llegó a la vivienda Uchiha solo se encontró con los familiares principales como Mikoto, Fugaku y Itachi a lo que al no saber el paradero de su amada les preguntaría donde estaba y estos con un enorme sentimiento de pésame en sus corazones no sabrían que decirle.

Naruto: Oigan Mikoto-san, Fugaku-san y Itachi-nii san ¿no saben donde podría estar mi novia Kiyomi?. preguntaría con un tono de enorme curiosidad ya que se le era muy extraño que no estuviese siempre dentro de la casa como lo hacía desde que se conocieron.

Mikoto/Fugaku: No lo sabemos Naruto... . Claramente lo decían con un tono de tristeza absoluta que obviamente estaba disfrazado para que el rubio no se diese cuenta de su horrible destino.

Naruto: Bueno ¿y tú Itachi-nii san, sabes dónde está Kiyomi?.

Itachi: Bueno verás Naruto mi hermana menor Kiyomi dijo que estaría en el parque cerca de la Montaña Hokage. Lo diría  con un claro pesar en su alma y con la mirada ensombrecida ya que decirle la verdad a alguien que desde que tiene memoria lo había considerado un hermano pequeño aunque no fuese de sangre le dolía mucho.

Naruto: Bueno gracias Itachi nii-san iré a verla. En eso se podía ver como aquel rubio iba camino hacia la puerta y alejándose del lugar, una vez que Naruto se había ido de la residencia Uchiha, tanto Mikoto como Fugaku sentían demasiado dolor en sus almas ya que no fueron capaces de decirle la verdad a quien consideraban como otro hijo más y sobre todo cuando no pudieron decirle que tenían un malo presentimiento de todo esto, y Itachi no estaba mejor que sus padres ya que apenas su hermano menor no de sangre dejó la casa cayó al piso de rodillas devastado y con su mirada aún sombría empezó a llorar levemente causado por unas lagrimas que recorrían su rostro lentamente y pronunciaba en voz alta:

Itachi: Dios, ¿que he hecho?... vendí a mi hermano pequeño a una tragedia sin igual y todo porque no pude decirle la verdad.

Y para mejorar la situación el cielo se empezó a nublar rápidamente y eso significaba que pronto comenzaría a llover, Naruto iba con toda prisa a ver a su novia y mientras iba corriendo gota tras gota tras gota habían comenzando a caer lentamente para luego convertirse en una intensa lluvia al Uzumaki rubio esto no le importó ya que ni el clima le impediría ver a su preciada Kiyomi, finalmente para empeorar aún más las cosas a la distancia comenzaron a caer rayos causando que el cielo se ilumine por breves instantes dando un ambiente de melancolía total, y cuando por fin pudo llegar a su destino, ahí los vio estaba la Uchiha menor besándose con su hermano menor Menma, el rubio para no llamar la atención se escondió cerca de unos árboles del parque mientras miraba la escena sintió como su corazón se rompió a la mitad y justo logró caer un rayo cerca de ambos enamorados para un efecto más dramático, pero eso no fue la gota que derramó el vaso sino lo que dijo su aparente novia después.

Kiyomi: oye Menma-kun ¿sabes hasta cuando tendré que fingir ser la novia de tu estúpido hermano?.

Menma: Pues no mucho tiempo pronto cumpliremos años y ahí se lo revelaremos como regalo de cumpleaños. Menma tenía una actitud arrogante y una expresión llena de victoria y satisfacción al imaginarse a su hermano llorando de la tristeza al enterarse.