Nami's Futanari Adventures [traduccion]

Capítulo 5: Alabasta Parte 1- Doublefinger

POV de Nami

"Vamos Luffy deja que se quede", me quejé.

"No lo se." Dijo la chica de goma: "Sí que intentó mataros".

"También Vivi". Dije.

Luffy se resistía a dejar que Valentine se quedara.

"Vamos Lu." Dije abrazándola por detrás.

Podía sentir el considerable trasero de Luffy presionado contra mi entrepierna y podía ver por debajo de su camiseta.

Esas tetas son tan bonitas. Eran copa F, ¿verdad?

Le susurré al oído: "¿Qué hace falta para que dejes que se quede?".

Besé el cuello de Luffy.

"Nami~", siseó.

Empujé a la chica sobre la cama y empecé a besarla. Jugueteé con sus calzoncillos y enseguida tuve mis dedos jugando con su coñito.

"Oh~" gimió sacando pecho "Justo ahí".

Detuve mis dedos "¿Puede quedarse?"

Luffy se retorcía mientras le negaba el placer mientras esperaba mi respuesta.

"Claro." Dijo: "Por favor... hazme sentir bien".

Pasé mi lengua por el clítoris de la chica haciéndola gritar.

"Buena chica." Susurré mientras lamía su cálido agujero.

Moví mi lengua a gran velocidad. Luffy gemía y jadeaba mientras se acercaba a su clímax.

"Ja...ja...ja...Nami.... voy a...."

"Cum Luffy." Le dije: "Cúbreme con tu jugo de chica".

"¡¡¡OHHH~!!!" gimió mientras orgasmaba y cubría mi cara con su dulce néctar.

"Voy a decirle a Val que puede quedarse". Dije lamiéndome los labios.

Algún tiempo después.

Mucho ha cambiado estos últimos días. Valentine se ha convertido en el vigía de la tripulación y ahora tenemos un médico. Es un reno llamado Chopper. Lo conocimos después de que casi muero...

Mientras estábamos en su isla hice que el doctor que me examinó le hiciera un chequeo a Luffy. Ahora era toda una niña. Dijo que parecía que siempre había sido así. Doctorine, la mentora de Chopper, me explicó que venía de mí. Me advirtió que si me corría en la gente a veces podía cambiar, ejemplos de ello eran el sexo de Luffy y los pechos de Val. Ella había oído rumores sobre Futanari, pero siempre había supuesto que eran leyendas hasta que me conoció. Me dijo que tuviera cuidado y eligiera bien a mis parejas.

"Nunca se sabe lo que le puede pasar a alguien si se te echa encima. Las leyendas dicen que los hombres siempre se convierten en mujeres...", me advirtió.

No voy a mentir, la idea de que los hombres se convirtieran en otras mujeres sexys como Luffy me había excitado...

Después de Drum Island, fuimos a Alabasta a ayudar a Vivi. De camino allí tuve tres chicas con las que aliviarme. Habíamos llegado a Alabasta, pero la capital estaba siendo atacada por rebeldes y Cocodrilo y Obras Barrocas estaban haciendo su movimiento al mismo tiempo. En un momento dado nos mantuvieron cautivos. Vi a la señorita All-Sunday mientras estábamos retenidos... tiene un aspecto bastante maduro...

Pero fuimos a Alubarna y ahí es donde estoy ahora. Intentando no morir porque Usopp me equipó con un favor de fiesta.

"¡AHHHH!"

Me apuñaló el pie esta mujer pincho.

¡Esta puta de mierda! Voy a destruirla... siempre y cuando salga vivo de aquí.

Sólo me quedaba un movimiento.

"¡Tornado Tempo!" Usé el tiro final... y salieron dos pajaritos.

"No..." Jadeé.

Voy a morir...

Los resortes de repente envolvieron a Miss Doublefinger y fue lanzada a través de un edificio. Cuando la alcancé había caído inconsciente.

"¡YO... YO GANO!"

"Tú... pequeña... zorra..." murmuró.

Miré a la mujer. Ella era musculosa, su pecho estaba en el lado más grande y tenía piernas largas.

Me lamí los labios "Cuál es tu verdadero nombre".

"¿Qué?

"Nombre". Exigí.

"Paula...", chilló.

"Bueno Paula." Dije jugueteando con mi bata "Como dicen, al vencedor va el botín".

Le mostré mi polla "Creo que serás el botín perfecto".

Sus ojos se abrieron de par en par al ver el tamaño de mi polla.

"No puedo moverme." Dijo sorprendida.

"No te preocupes. Si aceptas no apuñalarme, te haré sentir muy bien". A la señorita Valentine le encantó esto, estoy seguro de que a ti también".

Froté mi pierna contra su entrepierna y ella empezó a jadear.

"Eres muy guapo". Susurré mientras acercaba mis labios.

Empecé a besarla y me sorprendí cuando ella me devolvió el beso. Nos besamos durante un rato.

Cuando me aparté su cara estaba roja de rubor.

"Eres una chica muy buena". Me dijo.

"Tú tampoco estás nada mal". Sonreí satisfecho, "Listo para más".

Ella abrió sus piernas "Si...toma tu premio..."

Besé sus pechos "Qué gran premio".

Pasé mis manos por el pelo encrespado de Paula mientras la besaba. Puse mi polla en posición y mientras la besaba empecé a empujar mi pene dentro de ella.

"Mmmmm." Paula gimió en nuestro beso.

Sentí nuestros pechos chocar mientras nos besábamos. Moví lentamente las caderas y empecé a deslizarme dentro y fuera de su resbaladiza vagina.

"Tienes una polla tan grande". Dijo mientras follábamos en el callejón trasero "Siento como si me fuera a partir en dos".

"Estás tan apretada". Añadí, "Mi polla se siente tan ajustada".

Volvimos a besarnos mientras yo inmovilizaba a la mujer contra la estructura mientras le penetraba su calor.

"Oh joder Nami." Jadeó: "Voy a correrme".

Gruñí y sentí cómo las paredes de Doublefinger se tensaban alrededor de mi vara. Ella había llegado al clímax, pero yo seguía. Le di la vuelta y me preparé para tomarla por detrás. Puso la mano contra un edificio y sacó el culo. Estaba a punto de volver a su coño cuando decidí buscar otro agujero. Froté la punta de mi gran polla contra su culo.

"Ja". Ella jadeó "¿Mi culo?"

"Se ve bien y listo". Dije habiéndola lubricado con precum.

Paula gruñó cuando mi gruesa polla se introdujo en su culo. Su culo estaba apretado y yo gemía con cada embestida.

"Joder, tu culo es tan bueno". gruñí.

"¡Fóllame más el culo!", suplicó.

La azoté mientras la penetraba por el culo.

"¡Ah....ha...ah...oh!" Paula jadeó.

"Ya estoy tan cerca". Le dije: "Te voy a llenar el culo de semen".

"Hazlo." Ella jadeó: "Lléname con tu semen caliente".

Agarré sus caderas y empujé rápidamente "¡Aquí viene!"

Paula echó la cabeza hacia atrás en el orgasmo "¡NAMI!"

"¡JODER!" Grité "¡PAULA!"

Le llené el culo de semen. Me salí y todavía cubrí su culo con mi esperma.

Me senté para recuperar el aliento. Paula cayó al suelo en un montón con una mirada de felicidad en su rostro.

"Debería ir a buscar a Vivi y a las demás". Murmuré recogiendo mi ropa desechada.