A Lunatic's Lament [Harcy]

A Lunatic's Lament

Percy deseaba con todo su corazón que Harry pudiera ver todo lo que sentía por él, que él era la única persona que podía ver.

Era él único con el que soñaba estar.

Pero Percy era tan estúpido, tan patético que por seguir un juego había perdido su oportunidad con Harry.

Era muy tarde para disculpas, lo sabía en su corazón.

Lo sabía por la manera en la que Harry lo miraba, muy diferente a otras veces en las que Percy había metido la pata.

Sus ojos eran fríos, en el campamento no le dirigía una segunda mirada y cuando tenía que hablarle lo hacía de la manera más breve que podía.

Pero Percy no quería rendirse con él, necesitaba arreglar las cosas antes de perderlo para siempre.

—¿Podemos dar un paseo? —preguntó Percy, mirando a Harry con ojos patéticos—. Podemos ver las estrellas. Contar constelaciones.

Harry comenzó a caminar a la par que él, el ruido de sus pisadas era un doloroso recordatorio de que había hecho mucho para lastimar a Harry.

—Te lo ruego, perdóname —susurró Percy, arrodillado frente a Harry—. No se si pueda sobrevivir sin ti.

—Cuando entré a ese lugar te mirabas perfectamente cómodo, profesando tu amor a alguien que sabes que me hace daño.

Pero entonces Harry lo estaba besando y Percy sintió como si volviese a respirar, no importaba que una de las manos de Harry estuviera cerrada sobre su garganta.

Percy sentía que estaba más vivo que nunca.

Había una posibilidad de que Harry fuese suyo esa noche y Percy la tomó.

Besó la yema de sus dedos y bajó su ropa, besó el interior de su muslo y lo engulló por completo.

—Me gustaría que pudieras verme como yo te veo —dijo Harry—. Así no te importaría quiénes estuvieran gritando indefensos con miedo de perder sus vidas.

Pero a Percy no le podrían importar menos todos los demás.

Amaba a Harry, cada parte de él.

Aunque sus súplicas y ruegos no fuesen más que el lamento de un lunático.

Su relación era pura intensidad, Percy estaba contento con ello.