𝗖𝗮𝗳𝗲́

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Build odiaba el café, prefería mil veces las cosas dulces, como las malteadas o la leche rosa, la que era su favorita, pero gracias a querer tener un dinerito extra para caprichos de imprevisto, se metió a trabajar a una cafetería recientemente ab...

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Build odiaba el café, prefería mil veces las cosas dulces, como las malteadas o la leche rosa, la que era su favorita, pero gracias a querer tener un dinerito extra para caprichos de imprevisto, se metió a trabajar a una cafetería recientemente abierta cerca de la universidad, tenían todo tipo de variedad de bebidas, pero la que más odiaba servir era el café, el simple hecho de olerlo lo dejaba con un dolor de cabeza y no hablar de probarlo un poco para saber si quedo bien, ese trabajo se lo dejaba a su mejor amigo Apo, al cual pidió, más bien obligó, a trabajar con él ahí.

– Quedó muy bien Biu, listo para servir – dijo con una sonrisa el moreno, volviendo a su labor de atender en una de las cajas registradoras, llevándose consigo el pequeño vaso en el que se sirvió un poco de café para probarlo.

– No sé cómo les gusta esto – murmuró Build con una mueca, para después volver a la caja registradora que le tocaba a él, viendo que en esta ya se encontraba una fila de 5 personas esperando ser atendidas.

Poniéndose a trabajar, con una sonrisa, atendía, anotaba y cobraba lo que los clientes pedían.

– ¡Bienvenido a "Coffe love"! ¿Cuál será su orden? – preguntó acomodando el dinero con el que el anterior cliente le había pagado, al terminar, cerró la caja registradora y volteo a ver al cliente.

En su rostro, una gran sorpresa fue notoria, al ver frente a él al chico con el cual soñaba días y noches

Bible Wichapas Sumettikul.

Los sentimientos por el menor venían desde sus tiempos en la secundaria, pero estos se hacían cada vez más y más grandes.

Nunca había hablado con él, ya que con el simple hecho de estar a pocos metros, le eran suficientes para sentir sus piernas hechas gelatina y querer irse lo más rápido posible del lugar.

En estos momentos no se podía tomar el atrevimiento de hacerlo, estaba en su lugar de trabajo y no quería que su jefa lo regañara y como castigo lo pusiera a trapear el lugar al terminar la jornada durante toda una semana o hasta quizá un mes entero.

Simplemente no podía, siempre le había gustado llegar temprano a su casa y relajarse después de hacer sus tareas de la universidad, leyendo alguna historia o viendo sus redes sociales.

El hecho de pensar en quedarse más tiempo después de salir no le gustaba, que tal si en la fría noche de regreso a casa algo malo le pasaba, quizá lo asaltaban, quizá le hicieran daño, quizá...

– ¡Jakapan! – el grito de Bible lo sacó de su nube de preocupaciones trayéndolo nuevamente a la tierra.

Parpadeo un par de veces y enfocó el rostro del menor, mirándolo con el ceño fruncido y confundido.

– L-Lo lamento… ¿Qué de-deseas ordenar? – una sonrisa nerviosa se formó en su rostro maldiciendo internamente.

– Te decía que quiero dos cafés grandes y un frappé con chocolate extra para tomar aquí – Build asintió anotando el pedido.

ꗃ⌯ཻׄCᥲƒé︙BibleBuildDonde viven las historias. Descúbrelo ahora