Serendipity || Junior Wheeler

22

—Por favor mamá—decía Oliver rogando a mi madre para nuestro permiso.

—Ya te dije que no.

—Pero Lexy pagará todo, el viaje el hospedaje y todo.

—¡Que no Oliver!

—Nunca me dejan hacer nada.

Reí alto causando que ambos me miren.

—Oh, lo siento.

—Bueno, mamá por favor.

—¡Está bien!

—Gracias gracias mamá.

Oliver estaba muy emocionado, en realidad yo no quería ir, pero Junior me había insistido para pasar más tiempo juntos.

—¿Escuchaste eso?

—Si Oliver, no estoy sorda.

—De nada.

—¿Debería agradecerte?

—Gracias a mi estarás con Junior.

Sonreí y lo miré.

—Gracias.

Al día siguiente desperté de mal humor pues Oliver me hizo despertar a las 5 de la madrugada para empacar mis cosas para esta tarde, saldríamos a las 3 de la tarde, ¡Por favor tenemos mucho tiempo para empacar!

—Tienes que tener todo listo para irnos directamente.

—¿Eres invésil? ¡Obviamente tenemos que volver a casa!

—Si pero tardarás en empacar así que mejor hazlo ahora—dijo Oliver saliendo de mi habitación.

—¡Idiota!

Empaque todo lo necesario y me arreglé, desayunamos y por falta de tiempo tuvimos que tomar el autobús, subimos y Oliver fue a sentarse con sus amigos, yo caminé hasta atrás y me senté en el penúltimo asiento, odiaba tomar el autobús, era el lugar perfecto para que los idiotas se junten. Me senté al lado de la ventana, tomé mis audífonos y escuché “God is a Woman” de Ariana Grande, cerré los ojos y me crucé de brazos, estaba disfrutando de la música y entonces sentí que alguien se sentó a mi lado y me quitó los audífonos, Junior Wheeler.

—¿Podrías dejarme dormir?—dije sonriendo.

—¿Ni un beso de buenos días?

—Tonto—reí—devuelveme mis audífonos.

—¿Que escuchas?—dijo poniéndose mis audífonos—¿Dios es mujer? ¿Que escuchas?—dijo riendo.

—Escucha bien la canción antes de opinar—sonreí sarcástica.

—Alguien amaneció de mal humor—dijo Junior riendo.

—Lo siento, es que el idiota de Oliver me levantó a las cinco—dije cerrando los ojos mientras me apoyaba sobre la ventana.

—Ush—Junior se acercó un poco más a mi—¿Necesitas una almohada?—dijo.

—Si—reí y apoyé mi cabeza sobre su hombro, Junior recargó su cabeza sobre la mía—gracias.

—Descansa hasta que lleguemos—sentí como dejaba un beso sobre mi cabeza, sonreí como tonta.

Después de unos 5 minutos llegamos, Junior me levantó y me tomó de la mano para bajar del bus.

—Despiertaa—dijo sacudiendo mi mano—¿Ya te sientes mejor?

—Si, tomé medicamentos ayer, solo tengo un poco de tos.

—Que bueno—sonrió.

—Si, bueno, ¿Si irás al cumpleaños de Lexy verdad?

—Claro, pero si no irás yo tampoco.