𝟏𝟎 𝐃𝐀𝐘𝐒 𝐈𝐍 𝐋𝐎𝐕𝐄 || 𝐒𝐀𝐓𝐙𝐔

011: Tzuyu

N/A: prepárense para sufrir. (Lo vuelvo a subir porque Wattpad me anda fallando)

Para este capítulo si les recomiendo escuchar Say Something de Twice y Rolling in the Deep de Adele.

Tzuyu nunca planeó nada, en realidad. Antes de emprender el viaje, empacar todas las cosas no estaba en su mente, Shuhua sí. Entonces, la noche antes de partir hacia Europa, a pesar de que tanto su madre como Momo le dijeron en numerosas ocasiones que necesitaba comenzar a empacar, comenzó a empacar su equipaje. Metió toda su ropa limpia en su bolsa de lona y dio por terminada la noche.

Por lo tanto, puede que no sea una sorpresa que estuviera parada frente a su bolsa de lona angustiada, ya que se dio cuenta de que no había empacado suficiente ropa limpia para el viaje.

"Tenemos un pequeño problema". Tzuyu habló por su teléfono, que estaba encajado entre su mejilla y su hombro mientras miraba su bolsa de lona llena de ropa.

"¿Qué es?" La voz de Sana se escuchó desde la otra línea, sonando un poco más nerviosa que de costumbre.

El calor se apoderó de su rostro. "Bueno. Es que..." comenzó, tosiendo torpemente en su puño. "Es posible que no haya empacado suficiente ropa limpia".

Momo se rió desde su lugar en la cama, donde estaba sentada lista para el día, esperando que su mejor amiga terminara de vestirse. Tzuyu en silencio le dio la vuelta a la pelinegra y suspiró en el teléfono. Prácticamente podía ver la sonrisa de complicidad que estaba en el rostro de Sana.

"Está bien." Ella respondió, sonando como si estuviera tratando de pensar en las opciones. "¿Te dolería usar una de tus camisas sucias?"

Oh Dios. ¿Que Sana supiera que llevaba todo el día una camisa arrugada y posiblemente manchada de sudor? Diablos no. No esta pasando.

Se pasó una mano por la cara y sopló una frambuesa, sus ojos escaneando alrededor de la habitación en busca de otra opción. Luego, su mirada se posó en una bolsa de compras que había sido tirada descuidadamente en el sillón en la esquina de la habitación y sus cejas se levantaron, "Tengo otra opción".

"Oh, ¿la tienes?"

"Sí..."

"Bien, ¿entonces hemos terminado aquí?"

"No, Minatozaki, mi otra opción resulta ser la camisa I-heart-Paris que compramos ayer".

Escuchó una risita en la otra línea y una sonrisa apareció en la comisura de sus labios, "¿Te estás riendo de mí?"

"No."

"Mentirosa."

"Está bien, te verás como una turista. No es el fin del mundo." Una risita contradijo las palabras que dijo y Tzuyu gimió. Después de un momento, Sana chasqueó la lengua: "Si te hace sentir mejor, usaré la mía también".

Esa familiar sensación cálida y confusa se arrastró hasta su estómago. "¿En serio?"

"Sí."

Tzuyu, que empezó a sonreír de oreja a oreja, captó la mirada de Momo al otro lado de la habitación. La leve sonrisa en la comisura de los labios de su amiga fue suficiente para borrar la sonrisa de su rostro mientras se dirigía hacia la bolsa de compras al otro lado de la habitación. "Realmente eres la mejor, Sana Minatozaki".

"Así me dicen."

Sacó la camiseta de la bolsa de papel y la arrojó sobre su hombro, una punzada de emoción se formó ante la idea de coincidir con Sana. Bueno, tal vez más que una punzada. "Nos vemos abajo, ¿sí?"