Eva

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Pégate a mi
te suplico que hace frío,
quiero calentar mis manos,
pegándome a tu cintura,
sentir como tu calor,
interactúa en mi piel ,
oler tu aroma
al estar cerca,
hipnotizarme
de tus feromonas.
No es secreto
que desde el inicio del sol
es líquido lo que se evapora
y como sabes me derrites,
de sentirte quiero bailar
me encanta la melodía de tu respirar
si ya no existo es porque
como fruta prohibida me devoras.

Somos tentación, Eva y Eva
que de la procreación
se encarguen
las diosas griegas.

Aunque repitamos ,
tocarnos es psicodélico.
A nuestra corteza la penetramos
con ráfagas, agresivas a la vez sutil,
como cuando estoy tras de ti,
besándote toda la espalda
escuchándote gemir.
Reescribamos el genesis.

Entre la noche, de dos: Poesía Lesbo Erótica Donde viven las historias. Descúbrelo ahora