En el paraíso

Capitulo IX

Yo me desperté sintiendo sus besos húmedos en mi cuello

-mmm...que hacen?- dije entre suspiros

Ellas mordieron haciéndome gemir

-tan temprano quieren que las dejé sin caminar?-

-pueden ser- me respondieron mientras lamía mi cuello

-mis pequeños me están beneficiando y ni siquiera nacieron-

Les dije y con un movimiento rápido ellas quedaron debajo de mi

Yo las bese salvajemente, mientras hacía fricción con mis rodillas en sus coños muy húmedos

Alguien abrió la puerta rápido

-lo siento lo siento lo siento- dijo rápido Draco y salió enseguida golpeando la puerta

-no sabes tocar la puerta hurón!!?- le grite

-lo siento lo siento- dijo rápido

-yo me levanté y me puse una camiseta que me llegaba a los muslos

Y abrí la puerta donde estaba Draco muy rojo

-lo siento mucho Her-

-a mi no me pidas disculpas, sabes el humor con el que estarán ahora ellas? Estarán furiosas contigo, y más ahora que están embarazadas-

-lo siento-

-que necesitabas?-

-André me regaló flores!!- me dijo muy feliz

-me interrumpirte de follarme a tu madre y tu tía solo porque mi mejor amigo te regaló flores?!-

-en mi defensa no sabía lo que estaban haciendo, y me las regalo ayer en la noche cuando ustedes se fueron a dormir, pero cuando vine escuche gemidos y no quise interrumpir, y ahora vengo pensando que estaban durmiendo y te las estás por follar de nuevo-

-ellas me despertaron diciendo que tenían ganas, y yo no me iba a negar-

-Her no quiero saber de la vida sexual de mi madre, ni de mi tía-

-bueno, ahora te ganaste que van a estar muy enojadas contigo-

-has algo, me van a matar-

-ahora ya no hay nada que pueda hacer, tú te lo ganaste-

-yo que se, follas o algo-

-nos acabas de interrumpir, ahora va a ser difícil que evite que no se levanten para matarte-

-yo ya me voy- dijo y se fue yo volví a entrar y las vi sentadas en la cama, con la espalda apoyada en el respaldo de la cama y con los brazos cruzados

Tenían la cara que se notaba que estaban muy enojadas

-amor, dinos que nos detiene de matarlo ahora mismo- me dijieron muy enojadas

Yo me acosté en el medio de ellas y las abrace por la espalda

Ellas apoyaron sus cabezas en mi pecho para tranquilizarse

-no lo maten por favor, nos iba a interrumpir anoche, pero escucho gemidos y no quiso interrumpirnos, ahora el no sabía-

-igualmente-

-el idiota no sabe tocar- yo les di un beso a cada una

-tienen hambre?- ellas asintieron y se levantaron

Yo hice lo mismo y las tres nos vestimos

Las subí a mi cintura y bajamos a la sala donde estaban todas