poder

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Hidan: ¡Muere!  -grita el albino agarrando su guadaña.

Takato:  -hace un jutsu que nunca había visto el albino haciendo que el peliazul desaparezca-

Hidan:...  ¡juro que disfrutaré convertirte en sacrificio para mi dios!  -grita.

Takato: como que... tu dios es un poco infantil no, yo realmente no creo que exista  - dijo el chico mirando al albino desde un árbol.

Hidan: ¡ahhh!  -corre hacía ese árbol- ¡tal vez tu ridículo dios no exista idiota! 

Takato: lamento decepcionarte pero el mío es cien por ciento real  - sonrie volviendo hacer unos movimientos de manos para luego volver a desaparecer.

Hidan: ¡jajaja!  - se aleja del árbol aun con su guadaña en manos y mira por su alrededor con la esperanza de que su contrincante aparezca-  ¡mi dios se llama jashin y el tuyo como se llama!

Takato: lamento decirte que mi dios me tiene prohibido decir algo sobre el  -sonrie viendo al peliplata desde un árbol alejado-  es un secreto  - se cuelga en la rama del árbol con sus pies- te ves extraño viéndote de cabeza hidan

Hidan: ¡por jashin!  -grita-  ¡deja de ser una rata escurridiza, ven y pelea!  -corre hacía el otro árbol pero para en seco al ver como nuevamente el chico desaparece.

Takato: de acuerdo  - se escucha como habla desde no tan lejos y evidentemente era porque se encontraba a las espaldas de hidan un poco lejos nada más-  ¡hazme sentir el verdadero dolor!  ¡Dios Jashin!  -grita.

Hidan:  -el chico voltea a ver al peliazul y con una sonrisa de oreja a oreja le dice- ¡por supuesto que lo are!  ¡Jajajaja!  -corre hacía el peliazul con la guadaña en manos listo para atacarlo.

El peliazul habrío los ojos cansado pues penso que el peliplata lo hiba a matar de una buena vez pero no fue así, la guadaña del albino se encontraba contra su cuello haciendo presión ahí pero el ni cuenta de eso se había dado. Vio al albino con la misma sonrisa que el le dedicaba una sonrisa sádica y loca.

Takato: matame .... cumple mi sueño, hidan -dice con una sonrisa.

Hidan: ¡JA, LO ARE!  -el estaba a punto de atravesar el cuello del peliazul con su guadaña solo que una voz se lo impidió.

Deidara: déjense de tonterías, si siguen perdiendo el tiempo haciendo tonterías como estas no llegaremos a tiempo a akatsuki  -dice el rubio interrumpiendo la batalla que tenían ambos chicos.

Takato: ahh ¡deidara me quedé sin chacra ayudeme por favor!  -dice el chico cansado.

Deidara: yo como veo a hidan de maravilla, tu eres el único que se queja y además yo no te mande a que andes peleando gastando tu chacra que podemos utilizar si es que llegará aparecer algún enemigo  -regaña al peliazul.

Takato: lo se, pero fue hidan que me pidió que compitieramos quien aguantaba más y creo que me gano el...... ¡Ahora cargame no seas malo!  -hace berrinche-  solo un ratito

Deidara: no, además tu pesas mas que yo seguramente

Takato: solo dame....  -piensa- 30 minutos y nada más por favor

Deidara: de acuerdo  -suspira cansado- subete

Hidan: ¡Yo también!  -alegre.

Deidara: ¡Tu no!  -molesto-  ¡llevas molestandome desde que salimos de mi casa!

Hidan: ¡hay que resentida!  -dice para poner ambas manos en su cuello y caminar despreocupado- como quieras

El rubio se agachó un poco para que el contrario pueda subirse y así fue, takato paso sus manos al rededor del cuello del artista y luego se impulsó un poco para poder subirse y acomodarse después rodeó la cintura del rubio con sus piernas lentamente y así finalmente colocar su cabeza en el hombro del rubio.

sempai yo no muerdo (TobiDei)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora