Say my name

smutt

Antes de irme, que les parece si hacemos algo así como votaciones, es que quiero cambiar algunas portadas de las historias que traduje y darles unas más dignas pero obviamente no las escogere yo, lo es cogera el público mediante el número de comentarios.

Es decir, estoy dando la oportunidad de que el público pongo la portada que quiere en 7 de las historias que traduje, y el público votara por el que le guste más o sea más adecuada?
Dichas historias estarán en modo lista en mi miro de perfil, por si quiere verla.

Que dicen?
Claro, si es que quiere, de ser así, mandaría un correo a cada participante para que mando el dibujo, pueden ser dibujos originales, edits, o sacados de otros artístas (ojo con este último, siempre y cuando tenga el nombre del autor).

Bueno, sigan con su lectura gente.

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Plap!

Plap!

Plap!

Siguió empujando sus caderas hacia delante, su pelvis golpeando contra la tuya mientras bombeaba su polla dentro y fuera rápidamente.

"¡Joder! Estás tan apretada... y realmente sólo me chupas... no quieres nada más que yo dentro de ti, ¿verdad?".

Susurró mientras se inclinaba hacia tu oído. Su aliento caliente rozó el lóbulo de tu oreja, haciendo que el rojo de tu cara ardiera aún más. No respondiste nada y seguiste gimiendo al sentir su punta embistiendo tu punto.

[Poesía damas y caballeros]

Sin embargo, él no lo aprobó.
Empezó a morderte y lamerte la oreja, provocándote aún más escalofríos.

"Vamos... dilo. Di que eres una zorrita cachonda y necesitada..."

Susurró con esa voz grave suya que enloquecía más la zona entre tus piernas.

"S-sí...", dijiste en voz baja.

"¿Qué ha sido eso?"

Preguntó y empujó con especial fuerza dentro de ti, arrancándote un grito que provocó más de un deleite en el mono de las sombras.

"S-Sí...", dijiste esta vez un poco más alto.

"¿Qué ha sido eso?"

Preguntó y empujó con especial fuerza dentro de ti, arrancándote un grito que hizo más que las delicias del mono sombra.

"S-Sí...", dijiste esta vez un poco más alto.

De nuevo, te folló con fuerza con otro áspero empujón.

"¡Sí! ¡Soy una zorra necesitada!".

Tarareó lo que decías y continuó con su frenesí, remodelando el interior de tu cuerpo con cada movimiento despiadado. Los brazos que te rodeaban empezaron a enroscarse aún más, clavándole las uñas en la espalda y dejándole una clara marca roja. Dio un rápido siseo en respuesta a la sensación de escozor, pero continuó con sus caderas de todos modos.

La visión del rostro enrojecido y lloroso de su compañero mientras las lágrimas seguían cayendo de sus ojos le llenó aún más de energía, lo que se tradujo en una embestida aún más dura.

"¡S-Sí...!", gritaste más.

"Sí, ¿quién? ¿Qué debería gritar? ¿El nombre de quién? ¿A quién perteneces?", de nuevo te hizo cosquillas en la parte exterior de la oreja con su aliento y cada sílaba hizo que tu cerebro se quedara en blanco.

"Tú..."

"Sí... ¿y cómo me llamo?", preguntó mientras golpeaba tu punto dulce, lo que te hizo cortar la respiración.