╭XO KITTY - MIN HO FANFIC╮
[🌸]❝Kaitlin y Katherine (Kitty para sus seres queridos) habían sido las hijas menores de la familia Song Covey, eran las pequeñas Song.❞
❝Ambas tenían suficiente confianza, se volvieron mucho más unida...
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Después de pasar unos cuantos minutos en la sección de libros raros, disfrutando de la compañía del otro y Min Ho aprovechando a robarle varios besos a Kaitlin, ambos decidieron regresar con sus compañeros para no levantar muchas sospechas.
—Que mal perdedor —se burla Kaitlin de Min Ho luego de ganar, nuevamente, una partida de póker.
—¡Ahí viene Lee! —grita el chico que estaba cuidando la puerta de la biblioteca y se apresura a dirigirse hacia su lugar.
—¡Tomen sus posiciones! —pide Madison hacia sus compañeros que comenzaron a correr de un lado a otro queriendo tomar sus lugares.
Kaitlin tira sus cartas y toma la mano de Min Ho para que los dos comenzaran a correr hacia su mesa, ambos se sientan en sus lugares intentando fingir que estabas estudiando junto con sus compañeros que ya habían tomado sus lugares.
El profesor Lee entra a la biblioteca otra vez y analiza a cada uno de los jóvenes sintiéndose desconfiado de que no estuvieran haciendo algo malo, el hombre toma una pequeña tabla y camina hacia su escritorio.
—Gracias, Señorita Miller —dice el profesor Lee hacia Madison que le dio una radiante sonrisa desde su asiento—. Parece que mantuvo todo bajo control.
—Un placer —dice la pelirroja fingiendo inocencia.
Kaitlin mantiene la mirada baja y finge escribir, contiene una sonrisa, pero no evitó sonreír al momento de sentir una de las manos de Min Ho acariciando su pierna por debajo de la mesa.
—Min Ho —recrimina Kaitlin por lo bajo intentando quitar la mano del pelinegro de su muslo.
Min Ho sonríe divertido y toma la mano de Kaitlin por debajo de la mesa para que los dos entrelacen sus dedos, Kaitlin aleja la mirada avergonzada e intenta contener una tonta sonrisa, de igual manera, intenta soltarse de la mano de Min Ho.
—Oye... —susurra Kaitlin batallando con Min Ho una vez más, este se mantuvo mirándola con atención y negó ligeramente.
Kaitlin lo mira desafiante e intenta contener su estúpida emoción al darse cuenta de que Min Ho también la retaba con la mirada.
—Hora de almorzar, anoten sus pedidos y dénmelos lo antes posible —pide el profesor Lee sacando de su ensoñación a los dos jóvenes—. Pueden estirar sus piernas, sus brazos, lo que necesiten, pero solo tienen una hora para poder hacerlo.
