secret | au jihan

26

Al llegar al lugar de la fiesta Jeonghan bajó de la furgoneta y arregló su vestuario, la mano del chico temblaba levemente mientras éste estaba distraído observando el lugar por fuera.

— espero que todo salga bien, Yoon —Nayeon colocó su mano en el hombro del chico y sonrió.

— espero lo mismo —respondió. Su mirada se dirigió a Jeongyeon, ésta estaba acercándose a ellos mientras se arreglaba el cabello.

— es hora de ver a tu amado —jugueteó. — te ves muy bien, Jeonghan. Te prometo que todos estarán enamorados de ti —guiñó el ojo y se acercó a la entrada del local.

— ¿vienes? —preguntó Nayeon al ver a Jeonghan paralizado en su lugar.

— sí, sólo que necesito tomar algo de aire fresco, me siento nervioso —Nayeon asintió y entró al lugar con Jeong. 

Jeonghan suspiraba constantemente preguntándose como había llegado a ese punto de debilidad.

Ni siquiera tenía fuerzas para entrar al lugar y mirarlo, cuando lo veía sentía como una terrible culpa lo ahogaba. Era consciente del daño que causó y eso lo atormentaba demasiado.

Tomó una bocanada de aire y se acercó a la entrada del lugar, estando ahí se paralizó de nuevo mientras su mano sostenía la puerta, observó su mano por un rato y después sonrió falsamente para entrar al lugar.

Al cruzar la puerta sintió las miradas de todos sobre él, si antes estaba nervioso ahora se sentía ahogado.

Miró el lugar detalladamente, no era la primera vez que asistía a una fiesta de Taeyong pero realmente le sorprendía como cada año se lucia más.

Mirando hacia los alrededores lo encontró, él estaba apoyado sobre el barandal del segundo piso mirándolo, Jeonghan metió sus manos dentro del bolsillo de su pantalón, cerró los ojos y suspiró.

Al abrir los ojos nuevamente sus miradas chocaron, Jeonghan no pudo evitar sonreír débilmente.

Pero enserio sentía que su sonrisa era tan falsa, no podía mentir diciendo que se sentía bien cuando todo estaba mal, se sentía decepcionado de sí mismo porque había dañado a alguien, algo que se juró jamás hacer, había roto su propia promesa y le falló a alguien, eso lo ahogaba cada vez más en la miseria que sentía.

— pensé que no vendrás —Seungkwan abrazó a Jeonghan y éste le correspondió, distrayendose por completo con Seungkwan.

— ¿cómo estás, Kwan? —Seungkwan le brindó una mirada tranquila a su amigo y sonrió.

— todo bien... me alegra verte después de unos  días. —susurró— lo siento tanto Jeonghan, enserio, siento que mis palabras son insuficientes, me siento tan mal, enserio quiero que me perdo... —Jeonghan cubrió la boca de Seungkwan con su mano y con su otra mano le hizo señas para que guardara silencio.

— no vine aquí para hacerte sentir mal, para que te disculpes, sabes que todo está bien contigo —sonrió sin mostrar los dientes. — si sigues disculpándote me harás sentir mal a mi.

De repente las luces se apagaron indicando que la fiesta comenzaba y todos podían reunirse a bailar, cosa que no tardaron en hacer.

Jeonghan por su parte se alejó de la multitud en busca de su objetivo, la razón por la que él estaba ahí.

Y cuando lo vio no dudo ni un segundo en acercarse.

— y-- —Jeonghan sintió como jalaron su brazo y lo guiaban a una habitación que parecía ser de limpieza. — ¿Hansol?