—Torton, es una sorpresa verte por aquí.— Yo suspire mientras me acercaba a ellos.—Si jefe, solo venía saludar, ya me iba.— Por alguna extraña razón, se sentía muy nervioso en presencia de su jefe/líder.
Me puse de lado de papá, —Espérate Brutacio, toma esto.
Me acerqué a él y le entregué la caja, —Espero que te guste.— le di una sonrisa, no entendía por qué de pronto me sonrojaba, y tampoco entendía por que el también se sonrojaba.
Sin darse cuenta ambos chicos se quedaron quietos mirándose el uno al otro, perdidos en otro mundo, —Ejem, se puede saber que es eso?
Rodé los ojos, —Es un regalo papá, ya déjalo.
Note que Estoico iba a decir algo más, así que le indiqué a Brutacio que se fuera, el no sabia que hacer seguramente, pero para mi sorpresa me hizo caso a mi en vez de a mi papá, su jefe. —Bueno..gracias, adiós jefe.
Y se fue, así nada más. No se por que me sentí ofendida, si yo fui la que le dije que se fuera.
—Draco, ¿que le diste?— Suspire, de nuevo. Entonces también vi a Hipo, que estaba mirándome molesto.
—Mejor hay que entrar, está un poquito frío.— Digo caminando adentro de la casa, y de inmediato ellos me siguieron, como lo esperaba.
—Eran unos pastelitos, te tengo unos también a ti, para tu viaje.— Le digo mientras lo siento en una gran silla, que era acorde a él gran tamaño de mi padre, gigantesca. Eh Hipo en este momento estaba simplemente parado, se ha de sentir como yo en otros momentos, un personaje extra. Pero me hizo sentir mal, así que también me dirigí a él, —También para ti.
—Aw, cariño eso es muy tierno. Te aseguro que lo presumiré ante todos los demás tripulante, mi hija es la mejor haciendo todo esto!— El estiró sus brazos, y yo me acerqué aceptando gustosa su abrazo.
—Tu también ven Hipo.— Estire mi brazo inventándolo a un abrazo familiar, el se removió algo incómodo, pero de todas formas se acercó y se unió a él abrazo.
En ese momento los tres estaban en un amoroso y cariñoso abrazo familiar, disfrutando la compañía mutuamente. —Creo que es hora de irme, me estoy atrasando un poco..
—Aunque no creo que se vayan sin ti papá.— Dije dándole una sonrisa ladeada, el era el líder y jefe, no podían simplemente irse y dejarlo aquí.
—Pues si, pero no puedo atrasarme mucho.— Estoico se levanto de su asiento, casi chocando con el techo de la cabaña. —Mejor dame los pastelitos para irme de una vez.
—Clarines, pero no te los comas todos de uno pa..— Draco hizo un pequeño moin con los labios, —Ahorita vuelvo..
Subí por la escaleras, entrando de nuevo a mi habitación, y de nuevo me arrodillé a lado de mi cama, tapé la caja de madera y saqué otra casi igual, solo que tenia pequeños grabados en la madera, Flores, mariposas y algunos otros animales bonitos. La saqué y metí la otra, me levante y de volví de nuevo a donde estaban Hipo y Papá.
—Mira aquí está!, incluso personalize la caja.—Se la a tregua, esperando ver su reacción. Que fue justo la que esperaba, era una de completa emoción.
—¿Me hiciste uno así a mi?— Pregunto Hipo viendo la caja, —Ábrelo papá.
Y Estoico en realidad lo iba a hacer, pero al notar la mirada de su hija sonrió con nerviosismo. —No Hipo, esto es para el viaje jaja
Yo sonreí y le di un último abrazo de despedida, el salió de la casa, tomando solamente su hacha, que estaba alado de la puerta, nos dio una última mirada, pero antes de irse nos dijo, —No hagan mucho desastre..
Ambos nos miramos, y ninguno se atrevió a prometer algo que estoy más que segura, no cumpliríamos. Lo vi suspirar mientras cerraba la puerta y se marchaba, entonces me tengo que enfrentar a Hipo, con sus celos de hermano, aún seguía siendo algo raro para mi, pero ya sabía manejarlo mejor.
—Le diste eso a Brutacio antes que a mi..— No pude evitar reírme ante su puchero, —No te rías, es algo serio.
Yo levante los hombros, —Claro, claro, algo muy serio, no debería reírme.— Y me reí más mientras subía las escaleras, y me dirigía hacia mi habitación, Hipo iba detrás mío, aún quejándose.
—Yo debería ir primero, ni siquiera son amigos, Brutacio es..Brutacio— Dijo Hipo, moviendo sus hombros y con un obvio enojo.
—No seas tan celoso Hipo, y Brutacio si es mi amigo.— Me senté en mi cama, quitándome las botas.
Mientras la chica se quitaba las botas, la cara de Hipo se transformó por completo, antes solo era unos celos sin sentido, su lado hermano mayor proyecto actuando, pero ahora, realmente parecía enojado y decepcionado, —¿Tu amigo?...
Confundida por su reacción voltee a verlo, —¿Si?. Oye tranquilo, mira aquí tengo tu parte..
Mire sin comprender la habitación vacía, la puerta fue azotada por Hipo y me dejo hablando sola..¿Qué le pasaba?
Por otro lado, Hipo estaba furioso. Brutacio fue uno de los que le hacían "bullying", aunque en realidad en ese tiempo no existía esa palabra, lo acosaba. Diciéndole comentario hirientes acerca de su físico (junto su gemela y los otros), y eso lo daño mucho, Hipo recordaba que su hermana lo defendía de esas burlas, pero aún así ella era pequeña, no podía permitirse ser un débil por siempre y esperar que su pequeña hermana llegara y lo defendiera. Pensaba que ya lo había superado, "el pasado pisado", pero al parecer no es así, no lo había superado para nada.
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Capítulo corto 🥹
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Te protegeremos.
FanfictionUna chica rencarna como la hija del jefe de Berk, por lo tanto es la hermana pequeña del protagonista de una película la cual en su otra vida a ella le gustaba, Como entrenar a tu Dragón.