Sueños De Luz.

Capitulo 1.

Hoy nos vamos de Boston para siempre, o eso espero, estar en casa con todos los bellos recuerdos de mamá no ayudan mucho con mi animo, papá a tratado de parecer indiferente a la muerte de mamá, por mi, se que no es su culpa, pero no lo esta haciendo bien, estamos terminando de embalar recuerdos en las cajas, cajas que ojala no volviera a abrir, esto se vuelve cada vez peor, me miro al espejo, y encuentro mi rostro horrible, mi pelo hasta el hombro liso, mis ojos cafes grandes y sin pizca de brillo o alguna nota de felicidad, son solo cafe, mi cuerpo flacido, soy delgada, pero podria ser mas delgada, mi pelo podria tener un color mas bonito, pero al igual que mis ojos es de un monotono cafe, llegan los de mudanza por las cosas, las cargan a los camiones, y papá y yo tomamos un taxi hasta el aeropuerto, ni a el ni a mi nos apetece recorrer un camino tan largo en un auto, con los recuerdos de la mujer mas importante para ambos, nos subimos al avion, y muy dentro de mi surge la esperanza de que este maldito avion caiga, y morir, vivir el placer del descanzo eterno, y volver a ver a mi mami, la mujer que siempre tenia una sonrisa que regalar o alguna palabra de aliento que decir, ahora lo unico que tengo es un padre, al que amo, pero que a sucumbido en el alcohol, es trabajador, cumple con sus deberes, pero no existe un fin de semana que no beba, se emborracha hasta la medula y llora tendido en el sofa por horas nombrando a mamá, se que la extraña, yo tambien la extraño, ahora somos una pequeña familia, y las familias se apoyan, o asi deberia de ser, pero en este caso no lo es, el viaje se hizo mas corto de lo que esperaba, bajamos en un lluviozo seattle y mi padre tomo un taxi a nuestra nueva casa, espero que sea linda, y ayude con nuestro animo, las cosas que la mudanza debe traer no son mas que pinturas fotografias y el resto de ropa que no cupieron en nuestros equipajes, la casa que papá compro esta decorada y amueblada ya, espero que los muebles sean alegres, para que almenos algo cerca de nosotros se vea feliz, llegamos a una hermosa casa blanca, radiante, con un hermoso y grande jardin, lleno de rosas, blancas, rojas y rosas, a mamá le hubiese encantado, un nudo se acomoda en mi garganta y de pronto ya no puedo respirar ni soportar ver el estupido jardin, entro a la casa y es hermosa, me senti acojida por esta casa, es grande, muy grande, las paredes estan rebestidas de hermosa caoba lo que hace que de calidez, hay unos hermosos y esponjosos sofas blancos y frente a ellos una enorme chimenea, en casa no habia una asi, camino por un pasillo cerca de la escalera y encuentro una gran sala con un inmenso LED para ver peliculas que emocion, con mamá siempre veia peliculas y series, pero creo que ver peliculas ya no es tan emocionante, recorri la casa, y me di cuenta que tiene una piscina muy grande, casi tan grande como la de mi antiguo colegio, oh por dios!! Habia olvidado el insignificante detalle del nuevo colegio, a mitad del semestre, mi vida jamas habia sido tan deprimente, con mamá todo era muy diferente, subo literalmente arrastrando los pies, el segundo piso es bello tambien, el piso esta tapizado con una peludita alfombra roja como la sangre, es linda, las paredes siguen rebestidas de caoba, esta casa es tipo victoriana, siento algo muy acogedor aqui, siento que ya he vivido aqui antes, pero esto debe ser imposible mi padre compro esta casa hace alrededor de dos semanas, no se quien habran sido los antiguos dueños, creo que fue construida entre los siglos dieciseis y dieciocho, eligo una de las multiples habitaciones, esta sin querer da al jardin, no estoy de humor para elegir otra, aunque esta no me resulta tan incomoda, lo que en verdad me incomoda es la forma en que me siento en esta habitacion, esta decorada tal y como yo lo hubiera echo si hubiese vivido en el siglo dieciseis, solo le dare un par de toques y sera mi espacio, la cama es muy grande, de pronto un trueno me sobresalta, genial esto si me sube un poco el animo las tormentas, preparo como de costumbre mi bolso para la nueva escuela, y bajo al salon, papá ya esta ahi y por mi suerte no esta bebiendo, -quieres cenar papá? -le pregunto, y por primera vez lo veo sonreir, claro por primera vez desde que murio mamá,-claro que si mi amor, ya veras que aqui todo cambiara-me dice abrazandome y llevandome a la enorme cocina, sus palabras no puedo negar que aunque extrañas me reconfortaron no mucho, pero lo hicieron, cenamos algo ligero, ambos estamos cansados y mañana tenemos un gran dia, subimos juntos a nuestras respectivas habitaciones, tome una ducha en el hermoso baño, que parece de la realeza, me pongo la pijama y me duermo con el hermoso llanto de los angeles la lluvia, despierto asustada sudando, soñe que mamá ya no estaba, me dolio mucho mas darme cuenta que en realidad ya nunca mas iba a estar conmigo, trate de concentrarme en dormir, pero lo unico que lograba era recordar, su voz y su materna y amorosa mirada, cuando me desia "tranquila corazon, mami esta aqui nada te pasara, duerme mi cielo, cuando despiertes el sol alumbrara y mamá contigo estara" aun recuerdo sus rimas, esas que utilizaba para calmarme despues de un sueño horrible, en el que siempre soñaba que ella ya no estaba, me resulta aun mas doloroso darme cuenta que jamas despertare de la pesadilla en la que jamas recupero a  mamá, me levanto de la cama y me dirigo al baño, me miro al espejo y me veo en un pijama de los siglos pasados, que rayos me estare volviendo al fin una demente, ahora los vecinos nos conoceran como el viudo y la demente, me mojo la cara para calmar mi espasmo y pena y vuelvo a mirar el espejo, y ahi estoy yo con mis ojos inchados por el llanto y mi pijama rosa de franela con puntitos blancos, realmente estoy loca vuelvo a la cama y nuevamente la lluvia me lleva a recorrer el mundo onirico.