Sakura jadeaba el nombre de Sasuke al tiempo que el miembro erecto de este entraba y salía de su ya húmeda vagina, el sudor es uña cuerpos emanaba en pequeñas gotas, recorriendo sus cuerpos, el rojo en las mejillas de la peligrosa era solo una prueba de lo alta que era su temperatura corporal.
Sasuke succionó uno de los rosados pezones de la chica, está dio un tirón al cabello del Uchiha para después aferrarse a este, Sasuke aumentó el ritmo de sus embestidas después de alejase, coloco las piernas de Sakura sobre sus hombros para así profundizar la intromisión a su sexo.
Sakura podía sentir un pequeño dolor cada vez que él entraba, la llenaba por completo, tanto que dolía. Esto a Sasuke poco le importaba pues él estaba sumergido en su propio mundo, en sus pensamientos no era Sakura quien jadeaba su nombre, no...era más bien su primer amor, ese que no pudo ser, Sasuke escarbó entre sus más antiguos recuerdos y recreó una de las tantas veces que pudo estar con aquella chica a la cual realmente amo como a ninguna otra volvería a amar.
Dolía.
El corazón dolía al tiempo que el éxtasis del orgasmo le alcanzó.
Sasuke se alejó inmediatamente de Sakura, se quitó el preservativo, lo anudó para finalmente arrojarlo al bote de basura. Sin mirar a la chica se dirigió al baño, Sakura intentó regular su respiración, pudo escuchar el agua de la regadera chocar contra el azulejo del baño, era hora de volver a la realidad.
Ella se vistió antes de que el Uchiha saliera del baño, con una toalla amarrada a su cintura, y su típica indiferencia alojada en su rostro. Esto habría afectado a cualquier otra chica que acababa de entregarse de tal forma a su pareja, pero Sakura no era cualquier otra chica.
Y es que mientras Sasuke pasó el tiempo imaginando el cuerpo de su primer amor en cada caricia que otorgaba a la Haruno, está a su vez había estado fantaseando con alguien más.
Era algo retorcido y enfermo, pero para ellos era como una caricia al corazón.
Sasuke se vistió frente a la chica, juntos salieron de la habitación, se dirigieron a la planta baja de aquella enorme mansión, y fue Justo cuando pasaron frente a la segunda sala de estar, que el corazón de Sakura se aceleró, la risa del hermano mayor de Sasuke la hizo detener su andar. Solo Sasuke entendía el porqué, con mirada curiosa, Sakura intento localizar al dueño de aquella risa y en cuestión de segundos lo encontró, Sakura sonrió ampliamente, su mano izquierda se alojó sobre su corazón. Pero esta sonrisa duro poco es su rostro al percatarse que el mayor de los Uchiha no se encontraba solo, Sakura desvió la mirada segundos antes de que los labios del Uchiha mayor hicieran contacto con los de su acompañante.
-Le pedirá matrimonio, Mis padres están organizando una reunión con los padres de Izumi.-Comento Sasuke sin abandonar su indiferencia. Sakura comenzó a caminar en dirección a la salida, Sasuke sonrió.
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Sakura había pasado el fin de semana encerrada en su habitación llorando desconsolada, la cena en casa de los Uchiha se había llevado a cabo y había sido un éxito, un anillo con un enorme diamante adornaba ahora el dedo anular de Izumi ,ella había sido testigo del momento en que Itachi se arrodillo para pedir la mano de Izumi, y eso era lo que la tenia tan afectada, recordar era volver a vivir y Sakura no había parado de recodar ese preciso momento.
Ella sentía como el corazón se le hacía añicos, respirar le costaba, liberar el dolor por medio de lágrimas era lo único que podía hacer.
El ama de llaves toco la puerta, era la tercera vez en el día que buscaba a la Haruno, pues esta se negaba a comer.
-Largo, largo- Dijo entre el sollozo.
El personal que trabajaba en la casa de Sakura eran los únicos que se preocupaban por la chica, pues los padres vivian la vida viajando y disfrutando de la fortuna heredada a los Haruno por generaciones.
