capitulo 1

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Pablo, un joven estudiante de literatura, cursaba su 4 año de universidad. Había leído tantos libros en su vida que él mismo se consideraba un "come libros", incluso si alguien lo llamaba de esa manera, él no se sentiría insultado.

Pablo estaba realizando su tesis. Esta tesis era lo más importante para él, a nivel que había estado semanas completas cancelando salidas con sus amigos y familiares para poner toda su concentración dentro de su tesis.

William Shakespeare iba a ser el tema principal, Pablo estaba decidido en hacer un análisis profundo de sus obras.

Luego de su larga búsqueda por internet, dió con una librería en el centro de la ciudad que contaba con los tomos de las obras completas de Shakespeare. Este libro iba a ayudar a Pablo a avanzar más rápido con su tarea.

Después de bajar del colectivo, caminó un par de cuadras para encontrarse con la vidriera de la librería. Detrás de ella se encontraban varios libros, tanto clásicos como nuevos para atraer a todo tipo de público.

Pablo miró cada uno de los libros, analizando sus tapas con diferentes colores e imágenes pero sus ojos subieron y fueron dentro de la librería, donde se podía ver a un joven alto, con labios finos, una nariz resaltante junto con unos bellos ojos marrones y cabello rapado. Joven que se encontraba acomodando libros al lado del mostrador.

Pablo quedó hechizado por la belleza del joven, sintió que su estómago se llenaba de las conocidas "mariposas".

Lo había cautivado tanto que se quedó parado varios minutos mirando cómo el joven acomodaba libros para que la gente los pudiera ver. Por un minuto olvidó lo que venía a hacer.

Pablo movió su cabeza para los lados para así poder bajar a la tierra y volver para poder seguir con su misión.

La puerta de la librería se abrió, dejando sonar la pequeña campana que colgaba sobre ella, así avisando la entrada de un cliente.

El joven en el mostrador levantó su rostro, apuntando sus ojos hacia la puerta. Pudo ver a un chico con rulos, ojos brillantes y un hermoso lunar, entrando al local.

Ya dentro de la librería Pablo pudo ver la ropa del joven rapado. Estaba usando un buzo azul que se veía un poco desgastado junto a unos pantalones jogging negros

-Buenas tardes- el joven mostró su sonrisa- ¿Necesita ayuda en algo?.

Pablo solamente negó con su cabeza rápidamente mientras sus mejillas se ponían rojas. Sintió que un gato le comió la lengua ya que no pudo responderle al atractivo joven.

La librería estaba vacía por lo que Pablo se dirigió rápido hacia el pasillo donde se encontraban las bibliotecas.

Un cartel que decía "obras completas" le hizo saber que allí se encontraría su libro deseado.

La mano de Pablo se guío por las letras organizados alfabéticamente hasta llegar a la S. Sus ojos pudieron ver el apellido que había estado en su mente durante los últimos meses, Shakespeare, William. Tomó el libro pero antes de volver hacia el mostrador para así pagar por él e irse, decidió tomar un momento para pensar cómo iba a hablarle al joven.

No le había pasado esto desde hace mucho tiempo   ¿Ponerse nervioso por un chico? Ya no tenía 15 años, ni siquiera estaba en secundaria como para ponerse a pensar en chicos. Esa época había quedado atrás junto a sus romances adolescentes. Ahora se encontraba en la universidad, dónde tenía que poner toda su atención en su carrera y trabajos.

Soltó un largo suspiro para luego salir de su escondite, su mirada estaba en sus pies mientras sostenía el libro con ambos brazos, abrazándolo.

Cuando llegó al mostrador pudo ver las manos del joven que estaban sobre este. Pablo levantó un poco la mirada y pudo ver que el joven estaba mirándolo. Miro para abajo de nuevo y mientras sus ojos estaban volviendo al mostrador, pudo ver  en su buzo una pequeña placa plateada con el nombre "Lionel".

Dejó el libro en el mostrador para que Lionel lo tomara.

-Solo vas a llevar este?

-Si, solo eso- respondió Pablo rápido.

-Bueno, si te interesa, los otros tomos también están acá. Digo, por si tambien los necesitas…

¿Otros tomos? Pensó Pablo. No se había dado cuenta  que ese era solamente el primer tomo de las obras.

Se golpeó mentalmente por no notar esto, ahora le daba vergüenza buscar los otros tomos ya que le había dicho a Lionel que ese era el único que iba a llevar.

-Son mil pesos.

Pablo sacó su billetera para sacar un billete de 1000 y dejarlo en el mostrador.

Lionel le cedió el libro, que ahora estaba dentro de una bolsa con el nombre de la librería estampado al frente.

Pablo tomó la bolsa y sin hacer contacto visual con Lionel susurró un suave gracias, se dió vuelta y rápidamente se dirigió hacia la salida mientras escuchaba un "que te vaya bien, vuelva pronto" de parte del empleado.

Pablo caminó hacia la parada de colectivo con paso apurado, como si se le fuera a pasar. En su mente solo se preguntaba ¿por qué había actuado así? No le podía gustar un joven la primera vez que lo ve ¿Verdad?

Esas cosas nunca pasaban, ni siquiera en los libros.

Pablo golpeó su frente al recordar la historia de Romeo y Julieta, quienes se enamoran la primera noche que ambos se conocen.

No puede creer estar comparando una obra literaria junto a la "idiotez" que acaba de pasar.

Tal vez se sentía algo por Lionel…

Palabras entrelazadas (scaimar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora