•Capitulo 20•

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Elena

Me levanto con sueño y pereza, los recuerdos del beso me vienen a la mente y me sonrojo.

Mi chico de ojos verdes;) aún no es mío...

Me levanto, me doy una ducha y me arreglo, luego bajo las escaleras. Mi madre ya se había ido, me dejó un mensaje diciendo que hoy tenía mucho trabajo y que llegaría tarde. Hoy estaré sola en casa. Prepararé mi desayuno y luego saldré a hacer las compras que mi madre me dejó, junto con una lista de lo que necesitaba comprar.

Después de desayunar, iré al supermercado. Arregle todo y me coloque una ropa adecuada para ir a super. Me dirijo hacia la puerta y la cierro con llave. Luego, solicito un taxi y espero en la parada de la esquina. En pocos minutos, el taxi llega y me subo.

—¿Hacia dónde quiere que la lleve, señorita? —me pregunta el conductor.

—Al supermercado, señor —le digo.

—Está bien, señorita.

Yo asiento y el señor empieza a conducir y se dirige al supermercado. En ese momento, recibo un mensaje de Pierce.

[9:10] Mi chico de ojos verdes:
Buenos días Manzanita

[9:10] Elena: Buenos días, bobito.

[9:11] Mi chico de ojos verdes:
¿Bobito? ¿Por qué me dices así?

[9:11] Elena: Porque sí, jejeje.

[9:12] Mi chico de ojos verdes:
Bueno, manzanita, ¿qué haces?

[9:12] Elena: Voy al supermercado a comprar algunas cosas, ¿por qué?

[9:13] Mi chico de ojos verdes:
Porque yo también voy, jeje.

[9:13] Elena: ¿Y eso?

[9:14] Mi chico de ojos verdes:
Porque voy a acompañarte.
Nos vemos en el supermercado.

Pierce está loco, la verdad.

El señor me avisa que ya vamos a llegar, así que le pago, bajo del taxi y me dirijo a la tienda. Hace mucho tiempo que no venía aquí, las cosas son muy caras y siempre compraba en la tienda de la esquina de mi barrio. Pero ahora, si puedo comprar. No es que sea muy rica, pero mi madre me dejó dinero y también mi padre, así que decidí venir aquí.

La verdad es que es muy grande, hay muchas personas comprando con sus carritos de compras. Me dirijo y agarro uno de los carritos y me dirijo a la sección de verduras.

—Oye manzanita— escucho a alguien que me llama.

Me volteo y veo a Pierce aquí, ¿cómo supo que venía a este supermercado con tantos que hay en la ciudad?

—Hola bobito —le digo— ¿cómo supiste a qué supermercado iba a ir?

—Pues adiviné, estamos conectados jeje —dice y se acerca a mí— ¿pensaste en lo que te dije?

—¿En qué? —me hago la loca y agarro el carrito para dirigirme a donde iba.

—Ya se te olvidó —me dice y me detiene.

—Es que no me acuerdo qué fue lo que me dijiste —le digo.

—¿En serio se te olvidó? —me pregunta

—Pues claro, si me lo escribiste en un mensaje, quiero escucharlo —digo con una sonrisa.

—Ok, te lo voy a repetir —dice—¿Quieres ser mi novia, Manzanita?

•Un amor incondicional• [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora