Yuichiro Tokito era un chico muy inteligente, sobre salía bastante y siempre era el primero en todo, debido a eso, recibió una beca en la mejor universidad de Corea.
Yuichiro empezó a correr y saltar por todo el apartamento, gritando emocionado. De alegría levantó a su hermano menor, Muichiro, de los brazos y empezó a dar vueltas con él.
- ¡Muichiro, lo logré! ¡Lo logré! - Gritaba con entusiasmo el mayor.
Su hermano menor, (Si, no los hice gemelos por conveniencia del fic) sólo lo miraba alegre, a pesar de ser tan pequeño, podría comprender la felicidad de su hermano mayor, ya que él era consciente de la múltiples veces que su hermano se desvelaba estudiando.
Al dejar a Muichiro en el sofá, Yuichiro cayó en cuenta de algo, ¿Con quien dejaría a Muichiro? No se lo podía llevar a Corea, y aunque pudiera, estaría bastante ocupado con sus estudios.
Yuichiro empezó a llorar de la frustración, amaba a su hermano, él lo había cuidado desde la muerte de sus padres, pero aunque lo amara, tampoco era capaz de rechazar aquella oportunidad.Muichiro abrazó así hermano en un intento de consolarlo, cosa que hizo que Yuichiro llorara más.
¿Con quién coños dejaría a Muichiro...?
De pronto, sus ojos se iluminaron, y de un salto se levantó.
- Muichiro, quédate aquí, vuelvo en 15 minutos, ¿De acuerdo? - El más pequeño sólo asintió y Yuichiro salió corriendo del apartamento.
Después de varios minutos corriendo, finalmente llegó a una casa en específico, y con algo de vergüenza y preoupacion tocó la puerta, a los segundos la puerta fue abierta.
- Oh, Yuichiro, tiempo sin verte, ¿Que te trae por acá? - Preguntó un heterocromático apoyado en el marco de la puerta.
Obanai Iguro era un antiguo profesor de Yuichiro, el cual lo había acompañado en toda la primaria, aunque también era como un tipo de figura paterna para él. El heterocromático solia ayudar a Yuichiro cuando necesitaba dinero, cuando llegaba el momento de que Yuichiro le devolvía el dinero a Obanai, el azabache se negaba rotundamente a recibir el dinero, solo lo llegaba a recibir, porque Yuichiro se ponía a llorar y a suplicarle que le aceptara el dinero, de todos modos, Yuichiro le volvía a pedir prestado dinero a Obanai, y este le daba el dinero que Yuichiro días atrás le había dado.
En una que otra ocasión Obanai llegó a cuidar a Muichiro, ya que este se encontraba estudiando otra carrera, porque estaba harto de la miseria que le pagaban como profesor, esto sucedió cuando los padres de los hermanos Tokito recién habian fallecido.
Pero, volviendo al presente.
- Yo quería pedirle un gran favor, sin embargo... Me da mucha vergüenza con usted... -
- Ánimo, dime qué necesitas, si está a mi alcance, te ayudaré en lo que sea posible. - Contestó el de ojos bicolores.
- Bueno... Es que... Quería pedirle si podía cuidar a Muichiro... Me aceptaron en la universidad, pero... No sé con quién dejar a Muichiro y tampoco puedo llevármelo... - Dijo agachando la mirada y jugando con sus dedos totalmente nervioso.
- Vaya... Yo -
- ¡Si no puede no se preocupe! Hallaré a otra persona, no se preocupe. - Interrumpió nervioso Yuichiro.
- No te preocupes, si puedo cuidar a Muichiro - Los ojos de Yuichiro se volvieron a iluminar.
- ¿E-en serio...? - Preguntó sin poder creerlo.
- Claro, no me molesta, sabes que quiero mucho a Muichiro, estaré feliz de ayudarte.
- ¡L-le juro que cuando pueda, mandaré dinero para apoyarlo en todo lo posible! ¡Y cuando salga a vacaciones, vendré a verlo! ¡Le juro que le pagaré hasta el último peso! ¡S-se lo j-juro! - Gritó al borde del llanto abrazando al de ojos bicolores - E-en serio m-muchas gracias, n-no sabría que h-hacer sin u-u-usted.
- No te preocupes por pagarme, no es necesario. - Dijo correspondiendo el abrazo.
- ¡Nada se eso! Quiera o no, voy a pagarle todo lo que ha hecho por nosotros, téngalo por seguro y no aceptaré un no por respuesta.
- Como tú digas - Se rió y acarició los cabellos del más bajo.
Yuichiro finalmente se fue a Corea y ahora Muichiro se encontraba con Obanai. Muichiro se la pasaba feliz viendo televisión y comiendo. Cuando Obanai tenía tiempo, se sentaba al lado de Muichiro y conversaban, era una pequeña y agradable rutina.En una de esas ocaciones, cuando ambos estaban sentados en el sofá, escucharon resonar unas llaves, Obanai se quedó de una pieza, sabia perfectamente quien era, era su pareja, Sanemi Shinazugawa, aquel albino no sabía en lo absoluto que Muichiro estaba al cuidado de Obanai, y mucho menos que ya llevaba una semana con él. ¿Porque no lo sabía? Fácil, el albino estaba en un viaje de trabajo, Obanai no le comentó nada, porque sabía que Sanemi odiaba a Yuichiro, ya que este solía ser algo empalagoso con Obanai, y si hubiera visto que Yuichiro le pidió aquel favor a Obanai, Sanemi ya le hubiera tirado un balde de agua y sacado de su casa.
Obanai sólo intentó salvar su vida mientras pudo, así que agarró al Muichiro, apagó la television y subió corriendo a su habitación, cerrando la con llave y recuperando el aire.
Se escucharon como el albino subia las escaleras, luego se detuvo al frente de la puerta y la intentó abrir, al ver que la puerta tenia llave, forzó la puerta e intentó abrirla con las llaves.
- Puta madre, Obanai, si estás cojiendo con otro tipo, te juro que le corto la verga y a ti te tiro por la ventana - Amenazó mientras abría la puerta de golpe.
- Ahora somos padres, Yei... - Dijo con cara de preocupacion abrazando a Muichiro, y observando con espanto a su pareja.
- ¿Que es putamadre y que es verga? - Preguntó Muichiro.
Helouuuu.Si, ya se, esto no lo subí como prólogo, porque me di cuenta que siempre que subo un prólogo, nunca público el otro capítulo. Xd
Me pareció bonita la idea de Sanemi y Obanai como padres, así por eso lo escribí.
Voy a catalogar la historia como "madura", debido al lenguaje que voy a utilizar y por las escenas que van a haber.
No habrá taaaanto +18, sin embargo si intentaré añadirlo en varias ocasiones a la historia.
Sin más que decir. Los amo cuídense... Sayonara. 🐢💐✨