Preludio

40 3 6
                                    

-¡¡TOC...TOC!!-

Escuché la voz de mi madre mientras tocaba la puerta de mi habitación, quien venía acompañada de mi padre, mientras mostraban ambos una amplia sonrisa, ya que aún estaba recostado sobre mi cama, observando un vídeo sobre Historia, ya que me fascina como se ha desarrollado la evolución del Ser Humano el cual había llegado a tal punto de usar computadoras y aparatos electrónicos -Babe...puedes apagar un momento tu computador tu padre y yo tenemos algo importante que comentar contigo- Dijo dulcemente mi madre, por lo cual puse pausa al vídeo rápidamente para así dirigir toda mi atención en mis progenitores y observar como se acercaban para después mi madre sentarse a los pies de mi cama y mi padre al lado mío.

-¿Qué sucede Mamá?...¿Hay algún problema?- Cuestioné bastante preocupado, ya que en los últimos días habían ocurrido bastantes situaciones que me mantenían demasiado nervioso gracias a los incidentes en mi Universidad.

Escuché una leve sonrisa por parte de mi padre el cual acaricio suavemente mi cabello rubio algo cenizo para después derigirse a mí con cariño:
-Tae Pequeño, no tienes de que preocuparte, al contrario tenemos un regalo para tí- dijo mi padre dedicándome una amplia sonrisa para después dirigir toda su atención en mi madre.

-¿Un regalo?...¿Para Mí?- Cuestioné mostrando una amplia sonrisa acercándome feliz hacia mi madre.

-Sabemos que estos últimos días no han Sido los mejores para ti querido, pero queremos que sepas que tu padre y yo te amamos con toda el alma y no queremos que nada malo te pase, así que decidimos darte un regalo de parte de los dos.

La observe bastante curioso mientras ella extendía su mano con aquel sobre amarillo cerrado, por lo cual lo tome delicadente entre mis manos mostrando una pequeña sonrisa para después darles un fuerte abrazo a ambos.

-Gracias...Muchas gracias...n...no tenían porqué hacerlo- dije mientras pequeñas lágrimas aparecían al mismo tiempo que mis padres correspondían al abrazo para después escuchar como mi madre sorbia su nariz al igual que mi padre y al separarnos observar como mi madre limpiaba sus lágrimas de felicidad.

-Sabes que te amamos mucho mi pequeño Osito- Dijo con su voz temblorosa para después tomar mis manos y mirarme a los directamente a los ojos mostrando su maquillaje corrido por las lágrimas y sus ojos rojos por las lágrimas, mientras que por otro lado mi padre trataba de resistir el llanto -Anda ábrelo seguro que te va a gustar.
-Ya verás que sí Mamá.

Acto seguido procedí a abrí el sobre amarillo el cual contenía algunas hojas con letras en ellas, por lo que comencé a leer lo que se encontraba impreso en las mismas mientras lanzaba un grito de felicidad y así mismo comenzar a saltar en mi cama.

-!!!!!!!!GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS¡¡¡¡¡¡¡

-Entonces...¿Eso significa que iremos de viaje a Haeundae Beach?- Cuestioné emocionado mientras no paraba de leer el recibo del Hotel en el que nos hospedariamos.

-Te lo mereces cariño.

**********************
Este es el Preludio de esta historia espero que les esté gustando el contexto de la misma por lo que me gustaría que le den mucho cariño y amor a esta historia, recuerden compartir la historia con más personitas, nos ayudan a continuar con ella y sin más que decir espero que les haya gustado pastelillos.

El Chico de la Bicicleta | KooKVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora