La mafia sobrenatural [Versión BL]

Capítulo 1: Salvar al niño

Se supone que estarías conmigo por siempre... lo prometiste ¡Lance!

Abrió sus párpados, agitado, trató de controlar su acelerada respiración, llevando una mano a sus ahora húmedos cabellos rojizos por el sudor. Todo había sido una pesadilla, solo eso, una horrible pero efímera pesadilla...

Solo una pesadilla, se obligó a recordar, obligándose a sí mismo a incorporarse, para luego bajar sus pies de la cama, tocando el frío suelo de madera, descalzo. Se acercó a la ventana de su habitación de hotel, corriendo las elegantes cortinas color lila, afuera aún estaba oscuro, era demasiado temprano aún, el sol apenas si comenzaba a asomarse en el horizonte ¿Las cinco de la madrugada tal vez? No le importo, volvió a dejar las cortinas en su lugar y fue al cuarto de baño, debía darse una ducha, se sentía pegajoso por el sudor y estaba seguro de que ya no podría seguir durmiendo, no después de aquella pesadilla.

Luego de tomar una ducha de agua caliente se sintió más calmado, divisó su rostro distorsionado en el espejo ahora vaporoso del baño, deslizó su mano sobre él para ver mejor su reflejo. Lo primero en ser reflejado fueron sus ojos verdosos, cansados, algo que se había vuelto habitual.

También pudo observar las múltiples cicatrices sobre su cuerpo joven, que contrastaban con su blanca piel, producto de las diversas misiones peligrosas en las que se había visto envuelto los últimos meses, las cicatrices eran el recordatorio constante de que había sobrevivido y que a pesar de todo seguía siendo de utilidad para su organización. Todavía útil, era su único objetivo en lo que le quedaba de aquella vida. El tatuaje oculto en su antebrazo de un feroz dragón negro era la prueba de esto.

Su autoapreciación se vio interrumpida cuando escuchó el tono característico de su celular, encima de la mesita de noche, al lado de su cama, un trabajo nuevo seguramente.

Cubrió su cuerpo con una bata blanca, cortesía del hotel, y se dirigió a la habitación para contestar.

- Te creía dormido- La voz del otro lado comentó cuando él respondió a la llamada.

- No podía dormir, lo de siempre ¿Tienes algo interesante?

- Tu próximo objetivo, y lo mejor es que no tendrás que moverte de la ciudad.

- ¿Es seguro? He hecho algunos enemigos desde mi llegada aquí- Él comentó, mientras comprobaba que las cuchillas sobre su cama estuvieran en buenas condiciones.

- Será sencillo, es un pequeño traficante.

- ¿Drogas, armas, personas? - Interrogó, esta vez mientras comenzaba a vestirse, ropa particularmente negra, de la cual destacaba una gabardina de cuero negro.

- Personas.

Su expresión despreocupada cambió rápidamente a una de disgusto, aquellos sujetos simplemente le repugnaban.

- ¿Qué relación tiene con nosotros?

- Creemos que tiene en su poder a un sobrenatural, un niño.

Lance detuvo todo lo que hacía al escuchar eso último.

- Quiero una foto del sujeto y de sus cercanos, una del niño al que buscó, junto a su última ubicación conocida.

- Ya me encontraba en ello, te enviaré toda la información en unos segundos y... listo.

Una notificación llegó a su celular ante esto.

- Recibido.

- Puedo enviarte más apoyo si lo requieres.

- No, más agentes solo llamarán la atención. Aunque necesitaré apoyo al terminar con el trabajo. Los niños no son mi fuerte.

- Kyle y Scott están cerca de tu ubicación, haré unas llamadas.