El silencio de mi habitación era reconfortante, una pausa entre las turbulencias del día. Pero aunque mi cuerpo ansiaba descansar, mi mente seguía girando en torno a lo que había ocurrido en el bosque. Lyca, mi loba, había despertado, y con ella, un torrente de emociones y preguntas que no sabía cómo manejar.
Me tumbé en la cama, mirando el techo, intentando ordenar mis pensamientos. El olor a canela y chocolate seguía siendo un misterio.
Intenté ignorarlo, convenciéndome de que era solo mi mente jugando trucos. Pero Lyca no estaba tan convencida. Sentía su presencia en mi mente, como un susurro persistente, inquieto.
El día siguiente llegó demasiado rápido. Me levanté sintiéndome agotada, como si apenas hubiera dormido. Cuando bajé a la cocina, mi madre ya estaba preparando el desayuno, y mi hermano, para variar, estaba sentado devorando todo lo que encontraba a su paso. Al entrar asenti con la cabeza a modo de saludo.
-¿Cómo dormiste?- Preguntó mamá, mirándome con preocupación.
-Bien, - mentí. -Solo un poco cansada.-
Mi madre no dijo nada, pero noté la mirada de mi hermano. Sabía que él sentía lo que estaba pasando, aunque no lo dijera. Ser hijo del beta significaba que teníamos una conexión más fuerte con la manada, y eso incluía las emociones y pensamientos de otros lobos.
Mientras desayunaba, no pude evitar pensar en lo que había sucedido la noche anterior. ¿Por qué mis padres estaban tan preocupados? ¿Y qué era eso que decían que tenían que mostrarme? Algo estaba ocurriendo, algo grande, y aunque no sabía exactamente qué, podía sentir que mi vida estaba a punto de cambiar de una manera que no podría revertir.
El día en la secundaria pasó en un borrón. Claro que en el receso, al haber llevado ropa diferente a la que solía, varios estudiantes me dirigian miradas (dudo que su objetivo fuera hacerlas discretamente), la que más fue Mili, quien parecia fulminarme con lamirada. Y como podia olvidar las miradas burlonas de mis dos mejores amigas cuando se dieron cuenta de que escribí <<Ethan>> en medio de los apuntes de la unica clase que no tenia con ellas, pero, sí compartia con el, Ethan seguía rondando cerca, pero se mantenía a distancia.
Después de clases, decidí caminar de regreso a casa sola. Necesitaba un poco de aire fresco para despejarme. Pero a mitad del camino, sentí ese aroma otra vez. Canela y chocolate. Era más fuerte, más cercano.
Me detuve y miré a mi alrededor, pero no vi a nadie. Mi corazón comenzó a latir más rápido, y antes de que pudiera detenerme, Lyca empezó a empujar hacia la superficie, insistente.
-¿Qué es eso?- Pensé, comunicandome con mi loba y sintiendo que mi cuerpo comenzaba a tensarse. -¿Por qué estás tan agitada?.
-Lo sientes, ¿verdad?- la voz de Lyca resonó en mi mente, más clara de lo que había sido antes. -Estamos cerca de él.-
-¿De quién hablas?- pregunté, pero no obtuve respuesta.
El aroma se hizo más intenso, casi envolvente, y entonces lo vi. Un chico, de pie al borde del bosque, mirándome. Sus ojos grises eran penetrantes, pero había algo en ellos, algo familiar. Ethan. No como en la escuela, sino más... salvaje, más dominante.
-No puede ser- susurré, dando un paso hacia atrás.
Pero antes de que pudiera reaccionar, Ethan dio un paso adelante, sus ojos brillando con una intensidad que hizo que mi corazón latiera aún más rápido.
-Alice,- dijo, su voz ronca, cargada de algo que no podía identificar. -No me tengas miedo. Solo quiero hablar.-
Me quedé inmóvil, sin saber qué hacer. Todo en mi cuerpo me decía que corriera, pero algo en sus ojos, algo en la forma en que su lobo se manifestaba, me hizo quedarme, al menos un par de segundos, hasta que logré distraer a mi loba y empezé a retroceder rapidamente, virando sobre mi misma para empezar a correr a mi casa.
Sabía que si queria me seguría hasta el fin del mundo de ser necesario, Ellie, su hermana, me lo habia advertido, así que agradecí que no lo hiciera, no me creía capazde sostener una conversación con él.
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The weakest alfa
WerewolfAlice es una chica de 16, ella vive en la manada Silver Moon donde su padre es el beta, pronto descubre que no es su hija y que mucho poder está en su ser ¿Pasará de débil a fuerte o el poder la consumirá y morirá? Su mate decide rechazarla por ser...