El voto

Capítulo 8: Invitado

"¿Qué?" Shen sintió que su ojo temblaba de irritación mientras miraba a su padre con incredulidad y conmoción apenas reprimidas. "¿No puedes hablar en serio?"

"Shen", suspiró Goa con exasperación mientras bebía de su taza de té. "Serás el Señor de la ciudad de Gongmen algún día, entonces tendrás que hacer este tipo de cosas, así que es mejor que comiences ahora".

"Contrataría a un profesional que realmente quiera el trabajo", murmuró amargamente el príncipe blanco.

"No seas tan niño", dijo su padre con fuerza, sus ojos mostraban su impaciencia mientras miraba a Shen por encima del borde de su taza. Jing luego aprovechó ese momento para hablar desde donde estaba sentada junto a su esposo.

"Querido", la pava le dio a su hijo una cálida sonrisa mientras lo miraba sentado al otro lado de la mesa de sus padres. Shen había sido invitado a compartir su desayuno con sus padres, ya que era bastante temprano en la mañana, ninguno de ellos sería requerido para ningún deber oficial todavía. "El Festival de la Luna es un momento maravilloso para la gente",

"La ciudad gana mucho dinero con los forasteros que vienen a ver nuestros espectáculos de fuegos artificiales", dijo Goa con un murmullo antes de que Jing lo mirara.

"De todos modos", dijo mientras se volvía hacia Shen. "Esta será una buena oportunidad para ti, dale a la gente la oportunidad de ver lo que puedes hacer".

"Ya hago mucho por la gente, si no pueden ver eso ahora, entonces no entiendo cómo esto cambiará eso". Shen cruzó las alas mientras fruncía el ceño al suelo, sintiéndose como un niño otra vez mientras luchaba contra una batalla perdida. Sus padres eran bastante despiadados cuando querían algo.

"Bueno, esta vez no estarás solo"

La atención de Shen volvió a su madre.

"¿Qué?" preguntó bruscamente.

"No serás solo tú, Shen", explicó su padre mientras colocaba su taza suavemente sobre la bandeja. "Nos gustaría que tú y Lianne hicieran los preparativos y arreglos para el Festival de la Luna este año".

"Ustedes dos han tenido todo el verano juntos", agregó Jing con entusiasmo. "Ahora que el otoño está aquí, sería una oportunidad perfecta para mostrar lo lejos que han llegado juntos".

"Estás tratando de hacer de casamentero", dijo Shen inexpresivamente, sabía que la repentina participación de Lianne sonaba demasiado buena para ser verdad.

"Lo que pase con el festival no tiene nada que ver con nosotros", dijo su padre, aunque Shen vio un brillo travieso en sus ojos. "Pero Lianne está a favor de la gente, sería bueno que te vean con ella, juntos no tengo ninguna duda de que pueden manejar un evento así".

"Si quieres, Lianne puede encargarse de todos los arreglos públicos mientras tú puedes organizar el espectáculo de fuegos artificiales. ¡Siempre te encantó!" Jing estaba casi rebotando en su asiento, sus plumas rosadas y marrones hinchadas por la emoción.

"Bueno, sí-pero-pero-" tartamudeó Shen mientras trataba de encontrar una excusa. "Esto es demasiado para Lianne, ¿no? ¿Esperar tanto de ella?"

"Después de entrenar contigo, debo esperar que tal cosa sea muy fácil".

Shen se giró en su asiento para mirar boquiabierto a la puerta del comedor privado de sus padres y ver a Lianne parada allí con una hermosa bata verde y dorada, una leve sonrisa jugando en los bordes de su pico mientras entraba a la habitación para sentarse. a su lado y frente a Goa. Shen se dio cuenta de repente de su proximidad, sus plumas se sentían como si tuvieran un rayo bailando en sus puntas, y tenía que luchar constantemente contra el impulso de mirarla.