Kristen
Recibí un correo, del departamento de recursos humanos, de una de las empresas a las que envié mi currículo.
Desean concertar una entrevista online conmigo.
Es algo bueno, grandioso, realmente, pero, no me siento feliz. Porque de obtener ese empleo, podré largarme del pueblo, y...
¿Qué sucederá entre Laurie y yo, si me voy ahora?
No voy a seguirlo a la universidad, y dudo que él, cuando esté allí, en el campus, rodeado de todas esas jovencitas hermosas, vaya a querer permanecer en una relación a distancia.
Al final me va a abandonar, como lo hicieron todas mis otras parejas.
Por eso, es preferible que yo termine con todo, ¿cierto? Antes de concederle el poder necesario para hacer mi corazón trizas.
Parece fácil, el poner fin a nuestro amorío, cuando lo pienso con la cabeza fría. Sin embargo, cuando lo tengo cerca y soy presa de su magnetismo, decirle adiós me resulta una tarea imposible.
No quiero dejarlo ir...
Apago la computadora, y me doy una ducha. Enjabonándome todo el cuerpo, y limpiando mi cabello.
Llevo varios días sin tomar las pastillas, y las manos me tiemblan por causa de la abstinencia. Aunque es molesto, lucho contra la necesidad de drogarme. Deseo poner algo de orden a mi caótica vida.
Tras unos minutos bajo el agua de la regadera, la cierro, y salgo del compartimiento.
Me seco con una toalla, y me visto, con unos jeans de corte alto acampanados, junto con un crop top negro manga corta.
Me paso el peine por mi cabello, la raíz ha comenzado a crecer, y las mechas han adquirido un tono amarillo desprolijo. Pienso en sí valdría la pena teñírmelo de castaño, o cortármelo. Pero descarto la idea, porque soy perezosa, y odio tener que acudir al salón de belleza. Termino recogiéndomelo en una coleta alta. Estoy aplicándome maquillaje en la cara, cuando recibo un mensaje de Brad.
Quiere verme hoy, para ir juntos al cine...
¿Estaría mal si acepto su invitación?
Recuerdo lo enfadado que se puso Laurie conmigo, cuando tuve aquella cita.
Yo no le he hecho ninguna clase de promesa, pero aun así, me doy cuenta de que no deseo besar a Brad, o a ningún otro hombre. Quiero que sea Laurie Walker, el único en poner sus manos sobre mi cuerpo, y hacerme el amor.
Admitirlo, aunque sea solo a mí misma, me genera miedo. A la desilusión, al despecho. A decepcionarme nuevamente.
—Hoy no puedo, Brad. Estoy ocupada... Dejémoslo para otro día, ¿ok? —escribo.
—Ok —me responde él, junto con un GIF de un oso, que me lanza besos.
Coloco el teléfono sobre la mesa, y vuelvo a tomar las brochas de maquillaje. Me perfilo las cejas y delineo mis ojos, esforzándome, para dejar de aborrecer a la mujer que se me muestra en el espejo.
Entonces, mi teléfono móvil vuelve a vibrar. Lo cojo entre mis manos, y leo...
~~~~
¿Qué haces?
Salgo del trabajo en unos...45 minutos.
Si te acercas al pueblo, podríamos pasar el rato juntos.
¡Di que sí!
-L
~~~~~
Acepto, y le digo que lo pasaré buscando a su trabajo.

ESTÁS LEYENDO
Summertime Sadness: Amor de Verano
RomanceCuando el novio de Kristen falleció inesperadamente, su mundo se vino abajo. La culpa de su muerte recayó sobre ella y, tras la graduación de preparatoria, huyó del pueblo. Sin embargo, al perder su empleo y enfrentar problemas financieros, decide v...