shy - heehoon (resubida)

uno

Desde que Heeseung y sunghoon habían iniciado su relación hace aproximadamente siete meses, la timidez del mayor había sido siempre notoria, y aunque a Sunghoon le parecía sumamente lindo esa actitud en su novio, a veces sólo deseaba que esa timidez se fuera.

Sunghoon había batallado mucho para lograr que los besos que comparte con el mayor, sean mucho más duraderos y sensuales. Donde incluya sus lenguas y dientes chocando, hasta incluso lograr sentarse encima suyo. Pocas veces ha logrado esto, pero cada vez el avance es mayor, ya que una vez que Heeseung se deja llevar, se lo come a besos.

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Un día normal de su día a día se encontraban en el departamento del mayor viendo una película recostados sobre la cama del peliazul. Con Sunghoon apoyando su rostro en el pecho del mayor mientras este le acariciaba el cabello.

Sinceramente Sunghoon estaba muy aburrido, prefería mil veces más, tener una sesión de besos con su atractivo novio, que ver una película tan cliché que estaba casi seguro cómo terminaría. Por lo que miró hacia arriba para ver que en sí, Heeseung estaba muy concentrado en la película, y sunghoon quería su atención. Así que se le ocurrió una idea para distraerse un poco.

- Seungie~ - le dijo aún recostado en su pecho pero mirándolo con un puchero.

- ¿Qué pasa, mi amor? - el mayor lo mira.

- Estoy muy aburrido - dice con tono lindo para posteriormente levantarse y subirse encima del mayor.

Inmediatamente el peliazul se ruboriza ya que él sabía que cuando Sunghoon se subía sobre su regazo, significaba que intentará hacer algo. Y como lo predijo, el pelinegro se inclinó doblando su espalda y apoyando sus manos a los lados de la cabeza del mayor para estar más cerca.

- ¿Y si mejor nos besamos, Seungie? - el menor habló muy cerca de él anticipando mucho lo que quería hacer, Heeseung lo miró con su lindo rubor en sus mejillas, sentía la respiración del menor sobre sus labios mientras lo miraba coqueto. A veces desearía no ser tan tímido para poder actuar como Sunghoon desea. - Quiero besarte - dice al fin uniendo sus labios.

Y como siempre empezaban, los roces eran tranquilos y delicados, moviendo sus labios en sintonía, disfrutando de la textura de los labios contrarios. Así hasta que Sunghoon incrementaba la intensidad del beso, lamió y mordió ligeramente el labio inferior del mayor, sacándole un quejido. El menor aprovechó esto para introducir su lengua dentro de la boca del contrario para comenzar un beso fuerte de los que tanto le gustaban pero, aunque no le molestara ser quién guiaba el beso, a veces deseaba que fuera el mayor quien tuviera el control completo sobre él.

Se separó del mayor dejando a este un poco aturdido, Sunghoon lo miró desde arriba tomando sus brazos para atraerlo hacia sí para que quedara sentado sobre la cama aún con él encima.

Casi siempre que se besaban el mayor nunca lo tocaba más allá de su cintura, por lo que Sunghoon tomó las manos del peliazul y las guió para que sostuviera sus caderas, donde Heeseung apretó ligeramente mirándolo desde abajo, el menor le sonrió para posteriormente tomarlo del rostro y volver a besarlo.

Heeseung un poco más relajado pero igual de avergonzado, comenzó a mover sus labios con mucha más agilidad sobre los de Sunghoon, a la vez que masajeaba sus caderas y acariciaba su espalda con sus grandes manos, haciendo que el cuerpo del menor se estremezca ligeramente. Cuando ingresó su lengua a la boca de Sunghoon, este soltó un pequeño y bajo gemido que murió en sus labios.

El mayor nunca lo diría en voz alta pero, escuchar los sonidos que soltaba Sunghoon cuando estaba a gusto con él, lo ponían tanto que solo lo hacían avergonzarse más.

Motivado por los deliciosos sonidos de goce que soltaba el menor, Heeseung comenzó a chupar su lengua y a besarlo con ganas, metiendo su lengua dentro de la caliente boca de su novio, comenzando un juego lento y húmedo entre sus lenguas y labios haciendo suspirar al más bajo. Heeseung movía sus labios con pasión y ahora sus manos no podían estar quietas, ya que ahora se paseaban por los muslos descubiertos del pelinegro dando apretones, y dejando ligeras marcas, también quería tocar su trasero pero sentía que aún no era el momento.

Sunghoon solo se dedicaba a apretar los mechones de cabello de la nuca del peliazul mientras soltaba suspiros y gemidos queditos, disfrutando de los besos que estaba compartiendo con su novio. Le encantaba cuando el mayor se dejaba llevar, ya que así por fin tomaba el control sobre él mientras lo tocaba más allá de su cintura y le hacía sentir una vulnerabilidad exquisita. Él tampoco lo admitiría en voz alta pero, a veces deseaba que Heeseung hiciera con él lo que le plazca.

Cuando él aire les empieza a faltar se separan con pesar y con las respiraciones agitadas, esos besos los dejaron jadeantes pero con ganas de más, especialmente al menor que seguía con los ojos cerrados tratando de calmarse, no podía esperar para hacer muchas más cosas con el peliazul que lo volvía loco.

Pero este escenario se rompió en cuanto se miraron a los ojos, ya que el rostro del mayor se volvió a colorear de rojo en cuanto vio el perfecto rostro del pelinegro con un ligero rubor en sus mejillas, con los ojos brillantes y la respiración jadeante por los besos, todo esto acompañada de su bella sonrisa que dejaba ver sus lindos colmillos. Heeseung no pudo con tal imagen por lo que escondió su cara en el pecho del menor sumamente avergonzado. Sunghoon rio ante esta acción del peliazul, su chico atrevido lo había abandonado, trayendo de vuelta al tímido Heeseung.

- Deberías besarme así más seguido Heeseungie - el menor le dijo, abrazando la cabeza del mayor, a la vez que daba un besito sobre esta mientras acariciaba sus azulados cabellos.

- Trataré Hoonie - Heeseung dijo bajito aún escondido en el cálido pecho de su novio, mientras abrazaba su cintura.

- Mejor veamos otra película o te besaré de nuevo por lo lindo que eres - el menor bromeó bajándose del mayor para volver acostarse a su lado.

Heeseung solo pudo sonreírle aún con un ligero rubor en su cara para después atraer al pelinegro hacia su cuerpo y abrazarlo y darle un pequeño besito en su nariz. El menor está vez decidió elegir una película de acción sin recibir objeción del peliazul, ya que para él eran mucho más interesantes. Pero en sí la película no importó, ya que a los pocos minutos ambos chicos cayeron dormidos.

yo la triste porque no pensé que me fueran a borrar la cuenta, una disculpa por irme tanto tiempo, tenía bloqueo de escritora y me dediqué a otras cosas :((

les tqm, espero subir todo lo que pueda pronto para que tengan contenido de nuevo