PARTE ÚNICA

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Entonces, ahora hay vampiros.

Bien, Tetchou puede lidiar con eso. No son un gran rival para él, el Perro de Caza más fuerte. Su fuerza sigue demostrándose, después de todo, acaba de cortar un avión completo para ayudar a Fukuchi.

Pero necesita encontrar a Jouno. No importa qué. No importa sus órdenes pasadas, porque la lealtad al Comandante es lo que menos importa en esa situación

No cuando faltan dos de los Perros de Caza.

Tetchou camina apresuradamente por el lugar, está tan cerca de encontrar a Jouno, que teme lo que se va a encontrar.

No debería tener miedo.

Son soldados después de todo. A estado en escenas de crímenes, en juegos de asesinatos, a la vista de violencia irreparable incontables veces. Tener sangre en sus manos no es nuevo, no es raro en lo más mínimo. Incluso las lesiones no se tratan como mucho, sus cuerpos se convirtieron en algo más fuerte, listo para servir a la humanidad sin dudarlo.

Atender.

Ayudar.

Proteger.

Los significados de esas palabras se desdibujan, se funden en el cielo que permanece de un azul ferviente sobre la ciudad sin cambio alguno.

Son soldados, y deben estar preparados para perder a quienes los rodean, y aún así soportar la tragedia, seguir adelante bajo cualquier circunstancia.

Nada de eso explica por qué el corazón de Tetchou se acelera cuando ve el ataúd vacío y la sangre en esa oficina. O cómo se le revuelve el estómago con la vaga información que obtiene del destino de Jouno.

Nada de eso explica el gran dolor en el rostro de Teruko cuando escucha la grabación de Tachihara.

¿Podrán volver a ser un equipo?

Caminando por el aeropuerto casi vacío, lleno del amargo hedor del desastre. Tantas cosas han sucedido ahí en menos de un día. Traición, determinación, derrota.

Tetchou no recuerda la última vez que se sintió tan preocupado. Su pelea con ese chico rubio, la habilidad sobrehumana en la Agencia, había sido complicada. Tetchou luchó con una extraña especie de desesperación, descuidado en su afán por llegar a Jouno. Para salvarlo, porque perderlo sería impensable cuando ha demostrado una y otra vez que es el más fuerte de los dos.

Sintió algo extraño, algo horrible como la culpa cuando ese chico rubio había accedido a ayudarlo a encontrar a Jouno, sonriendo amablemente como si Tetchou no hubiera sido quien lo apuñaló en esa pelea en el camino, en lo que parecía meses atrás pero solo habían pasado unos cuantos días.

Pese a todo, la agencia no eran más que terroristas sádicos y de sangre fría, no se detendrán ante nada, sin importar cuán jóvenes o amables sean. Harán cualquier cosa para poner en marcha sus planes y destrozar el mundo.

¿No?

Pero tiene cosas mucho más importantes en las que pensar que eso. Teruko y él todavía tienen que averiguar qué está pasando con la inocencia de la Agencia, con Tachihara.

Y bueno, ahí está Jouno . Debe haberse lastimado bastante si incluso un perro de caza podría sufrir heridas tan graves. Tetchou vio la sangre, de vuelta en la habitación con el ataúd del vampiro. Solo puede asumir cuánto resultó herido Jouno.

Finalmente, llega al lugar donde debería estar Jouno, y allí estaba. Sentado en el piso desordenado, sosteniendo su costado y luciendo como un desastre total. ¿Realmente ha sido este el trabajo de la agencia?

Sus ojos están cerrados, como siempre, su dolorida respiración es tan superficial que Tetchou corre a su lado preocupado, pero por la forma en que se detiene y trata de equilibrar su respiración, el hombre de cabello blanco lo ha escuchado. Jouno hace como si fuera a ponerse de pie, con la ropa ensangrentada y desgarrada, mostrando horribles heridas. No lo logrará, ¿verdad?

Heridas de arma blanca. Solo unas pocas cosas podrían causar tantas lesiones como esas. Pero no, eso no puede ser.

El hombre da un par de pasos, estremeciéndose por el evidente dolor. Tetchou espera que empiece a hablar, al menos a quejarse, pero no lo hace. Un leve rastro de sangre, ahora seca, había estado cayendo de su boca bien cerrada. En algún momento, sus piernas niegan la acción de caminar y se tambalea hacia adelante. Tetchou lo atrapa a su pesar, porque sabe que a Jouno no le gustará.

Definitivamente se quejará, enojado por la respiración acelerada de Tetchou y el latido de su corazón demasiado rápido.

Pero no lo hace.

En cambio, Jouno permanece en el casi abrazo, sus uñas se clavan con fuerza en los hombros del otro. Tetchou siente una quemadura en los ojos, una apariencia de lágrima que amenaza con abrirse paso por su rostro. Entonces, Jouno sonríe, le otorga a Tetchou la amabilidad de su voz.

Una sonrisa, tan extrañamente genuina, tan clara que brilla en la oscuridad de la habitación, en la sangre que mancha la boca que la forma.

Una voz ahogada, la crueldad casual que tan a menudo lleva está completamente desaparecida.

"Ah... parece que me encontraste".

El peliblanco se las arregla para aferrarse a algo de ese tono malicioso que siempre le dedica a Tetchou, y el cual siempre traía consigo.

Le sorprende el gesto, la ternura extrañamente intensa del momento, incluso con la sangre, la traición y la incertidumbre, pero Jouno está ahí, en sus brazos.

Jouno deja caer su cabeza sobre el pecho de Tetchou, sigue sonriendo de esa manera tan verdadera que lo está haciendo. Un momento tan débil, con tanto que él querría decir.

Tetchou nunca ha sido de palabras o emociones, pero en este momento su garganta se hincha con la comezón de decir tantas cosas, para dejar salir el sentimiento de su corazón. Desea ser elocuente o al menos un buen mentiroso, para poder dejar salir las palabras sin que su voz se rompa como lo hizo la pequeña jerarquía de los Perros de Caza.

Sin embargo, sabe que Jouno lo sabrá , al final .

Su corazón late, errático y desesperadamente, frenético de alivio después de la preocupación enojada que sintió mientras luchaba, mientras corría. Cualquiera de sus órdenes pasadas del Comandante ha sido olvidada, en la prisa por encontrar a Jouno. Todo esto para que sus emociones ahora vengan a borbotones. Realmente lo había encontrado.

Se abrazan muy cerca, muy cerca, en esa habitación en ruinas del aeropuerto vacío.

Bueno, el mundo puede irse al infierno por un momento. No es como si fuera a durar.

"Si, lo hice."

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⏰ Última actualización: Jul 04, 2023 ⏰

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