señor desconocido

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--espero que todos hicieran la tarea-- dijo la maestra de historia, recordando la tarea que por supuesto no hice.

--agh...por qué diablos deja tarea si sabe que nadie la hará-- le susurré a Yamilet que se encontraba sentada detrás de mi

--¡hey!, yo y las demás chicas la hicimos

--perdón señorita calificaciones perfectas--me burlé discretamente, o lo que yo llamo driscreción

--ya vamos a iniciar de nuevo--preguntó arta de mis burlas

--oh, vamos al final te hacen gracia, no trates de negarlo--voltee parairarla directamente a los ojos

--lo que tú digas, volteate--dijo, claro que ignore lo ultimo, no la iba a dejar en paz hasta que estuviera arta.

--oye Osiris, ¿tienes un lapicero que me prestes?--al escuchar esa voz, se me erizó la piel, aun duele mucho recordar el dolor de su rechazo

--si, toma Edgar--escuchar ese nombre me dolió

porque sí soy la tipica chica que se enamoró de el guapo el salón y el guapo de la escuela, el tipico chico"todas mias"

--entendiste que vamos a hacer?--le pregunte a la chica para evitar la tipica pregunta de '¿estas bien'

--si, mira tenemos que...


--deja de hacerte sufrir  el no merece ni una sola lagrima tuya--repitio por milesima vez Nahomi

--además si tú quieres podemos ir a madrearlo--dijo Sandra

--exacto--dijo  esta vez Cynthia, apoyando la idea de Sandi

-- esta ciego si  no ve lo hermosa que eres-- me apoyó Mafer

--esta bién, yo estoy bien-- sonreí, pero el vacio y el dolor aun no se iban. Nunca entendere por qué duele tanto si ni siquiera lo conocía bien...

no era momento de estar triste, por dios era yo,  la chica que cambiaba de ligue más que de sosten. ¡diablos! creo que debí ahorrarme eso.


--¿quién quiere un helado?--pregunté a mis amigas, y aunque la respuesta fue obvia para mi con tan solo pensarlo un microsegundo, todas levantaron la mano, esperando que sacara el dinero para comprar nuestro manjar.--vamos


--me da uno limón, por favor-- dijo el chico que estaba un lugar delante de mi, parecía de segundo curso-- me da uno igual para la señorita de atrás.

lejos de ruborzarme como normalmente haría, sentía que solo era una broma más de parte de cupido, pensé que solo era amabilidad, cosa que una semana atras hubiera confundido con atracción.

y puede que suene muy tonto, pero creo que no estoy lista para algo con alguien, no después de estar sufriendo así por un simple chico....

--no, gracias, yo puedo pagarlo sola, señor desconocido-- dije con un poco de burla al final

--yo insisto--

--como quiera, señor desconocido--dije fingiendo rendirme--deme una nieve de veinticinco pesos, por favor señor.

--parece , que  a la señorita bonita le gusta gastar dinero de los demás-- dijo con un tono burlesco, extrañamente  ¿atractivo?. Seguro que es igual con cualquiera, pero al menos consegui una nieve más grande

--bueno y que más da, tú querías invitatme algo, aunque no conseguiras nada--dije con burla remarcando la ultima palabra

--creeme, señorita  bonita, lograré enamorarte

--lo dudo mucho, pero si quieres intentarlo-- ¡Shit! se supone que el amor no es para nosotras

--es un trato, señorita bonita-- definio el final de la extraña conversacion con un tono coqueto, que sinceramente me habría enamorado. Pero repito el amor ya no es para mí, cupido puede vender mi media naranja a una juguería ya.

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Eclipse TotalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora