𝟬𝟳 𝗗𝗼𝗺𝗶𝗻𝗴𝗼

245 11 1
                                    

Jungkook se acostó en la cama todo el día reviviendo los eventos de ayer en su cabeza. Para su gran sorpresa, se divirtió mucho porque tenía a Taehyung cerca.

Al final de la noche, temió que tal vez este plan suyo saliera terriblemente mal en algún momento. En lugar de empujar a Taehyung a la oscuridad, lo empujaron a él a la luz.

Quizás Taehyung no estaba nada mal. De hecho, Jungkook se dio cuenta de que posiblemente, solo tal vez, existía la posibilidad de que también le gustaba Taehyung.

El baile estuvo genial.

La comida estuvo grandiosa.

Taehyung fue genial.

Todo estuvo genial.

Incluso había una pequeña posibilidad de que pudiera haber besado a Taehyung ayer.

Pasaron por una heladería antes de dirigirse a casa después del baile. Taehyung estaba lamiendo su cono de helado mientras Jungkook hablaba de algo... no recordaba qué. No recordaba mucho desde que fue hechizado por sus labios. Trató de inclinarse pero luego dejó caer su propio cono en su regazo.

Fin del momento en que podría haber sido un beso.

──¡Jungkook!

Saltó de la cama ante el sonido de su mamá gritándole. Corrió escaleras abajo para encontrar a Taehyung en su puerta.

──Ahí está. ──suspiró su mamá.

Jungkook se acercó lentamente a Taehyung que tenía un abrigo muy familiar en sus manos.

──Olvidé devolverte tu chaqueta de cuero. ──se la entregó. ──Gracias.

──No hay problema... podrías habértela quedado. Tengo otro. ──mintió.

Su mamá negó con la cabeza y los dejó solos.

──Escucha, Jungkook. Quiero agradecerte por darme una oportunidad después de que hice obvio que me gustas. ──Taehyung giró su pie nerviosamente. ──Pero, solo porque me gustas no significa que debas sentirte obligado a hacerlo, ya sabes... invitarme a salir.

──No me sentí obligado.

──Solo pensé que era gracioso. ──hizo una pausa y miró directamente a los ojos verdes del rizado. ──Jungkook, eres un buen tipo, pero no quiero que me hagas ningún favor.

──¿Favor?

──Jimin me mencionó que dijiste que me merecía una oportunidad y que querías tener la mente abierta. El hecho de que me gustes no significa que también deba gustarte. Así es como funciona, las personas no obtienen todo lo que quieren. De todos modos, vine para devolverte la chaqueta y darte las gracias por lo de ayer. Me divertí mucho.

Jungkook sintió que su chaqueta se deslizaba en el momento en que Taehyung también dio ese primer paso hacia su auto. Rápidamente, se acercó a él y lo detuvo.

Taehyung miró la mano de él que agarraba su codo.

──Taehyung. ──frunció el ceño. ──Si tan solo me hubiera tomado siete segundos agradarme, pero me tomó siete días.

──¿Qué?

Jungkook no le explicó con palabras toda la semana que empezó a gustarle inesperadamente de él.

En cambio, estampó sus labios en los del castaño y eso solo le dijo todo lo que necesitaba saber.

Entonces, en ese beso de calcetines de leopardo, graffiti en el baño y camisetas personalizadas, se enamoró de ese chico excéntrico que no podía soportar hace una semana.

Taehyung se apartó. ──Tengo vergüenza.

──¿Por qué?

──Pasé cinco horas el fin de semana pasado borrando nuestros nombres de los baños.

──Es una pena. ──sonrió Jungkook. ──Porque te aseguro que se habrían visto hermosos.

Una semana [ KookTae ]Where stories live. Discover now