Otro día más, otro día mas sin querer ni levantarme. Me veo demacrado, parezco muerto, mi físico se ve muerto, mi mente está muerta, pero aun así mi ser sigue vivo. A veces me pregunto porque, ¿Por qué estoy vivo, pero me siento como si no lo estuviera? Como si el tiempo avanzara y avanzara, pero yo sigo en el mismo lugar. Miro la fuerte lluvia que cae desde la ventana, supongo que soy como la lluvia, estoy cayendo, cayendo en un abismo del que no puedo salir por más que lo intente, por más que grite por ayuda y mi desesperación por salir crezca, no hay nadie y yo sigo cayendo cada vez más y más profundo.
Intento levantarme, pero me siento tan cansado, por mucho que duerma todo el día simplemente mi cuerpo no es capaz de descansar ni de relajarse, mi mente da vuelta en círculos, siempre llegando al mismo punto, La muerte. Una solución que se ve tan fácil, pero en realidad es tan compleja.
Al fin logro levantarme, me dirijo al baño de una forma tan lenta, siento como si mi cuerpo pesara o tuviera una pesa amarrada a mis pies. Llego al baño, me lavo el rostro y al mirarme al espejo examino cada facción de mi cara, ojos apagados y decaídos, piel pálida y un cabello opaco, sin brillo y despeinado. Suelto un fuerte suspiro. - Me veo como un fracasado - digo en voz baja. Termino de arreglarme, aunque sea un poco para no verme tan desastroso.
Antes de salir de mi casa me pongo mis audífonos y me coloco la capucha. Odio salir, siento como si todo mundo me viera con cara de asco o desprecio y susurraran cosas a mis espaldas, pero los audífonos y la capucha calman ese sentimiento.
Me dirijo a la estación de metro, un lugar muy grande y también muy sucio, me coloco a la orilla del andén a esperar el metro, me encierro en mis pensamientos cuando siento un empujón, casi caigo, pero alguien me agarra.
- perdón!, deveras lo siento mucho no fue mi intención - Dice el chico casi gritando.
- esta bien no te preocupes-.
- Thi...- no alcanzo a terminar porque llego el metro.
Aproveche ese instante para irme. Justo había un asiento vacío así que me senté y el metro se fue.
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cayendo como la lluvia
Teen FictionNoah, un joven de 17 que vive solo y tiene trastorno depresivo. piensa que para el no hay esperanza y que su única salvación es la muerte. Thiago, joven de 18 que se encarga de cuidar de su hermano pequeño desde que sus padres fallecieron, pero sigu...