A la mañana siguiente, Taeyong se levantó temprano. Jaehyun había dicho que pasaría a buscarlo para ir juntos a la escuela, y eso lo tenía nervioso. Mientras se cepillaba el cabello, escuchó la voz de su mamá gritar desde el primer piso.
"¡Taeyong! ¡Te buscan!"
El corazón de Taeyong comenzó a acelerarse. La idea de pasar todo el día con Jaehyun lo ponía muy feliz pero al mismo tiempo un poco nervioso. Mientras bajaba las escaleras con cuidado, sus pensamientos volvían una y otra vez a lo que había pasado con Kai, Yuta y Soobin. Aunque Jaehyun había prometido que todo estaba bajo control, con Yuta y Kai, nunca menciono a Soobin y tenía miedo de que Soobin fuera a intentar algo. Taeyong no podía evitar sentirse ansioso. No había respondido los mensajes de sus amigos, ni había querido volver a la escuela. El miedo a que Kai y los demás buscaran vengarse de Jaehyun por medio de él lo mantenía con mucho ansiedad y miedo.
"¡Taeyong! ¿Qué haces parado allí? Te están esperando. Ve rápido, asegúrate de compartir con ese chico, empaque refrigerios para los dos", le dijo su mamá, guiñándole un ojo y entregándole su bolso junta a una pequeña lonchera. "Cuídate mucho, bebé. Te amo."
"Gracias mamá. Te amo, nos vemos", respondió Taeyong, intentando calmar sus nervios.
Al salir de la casa, se encontró con Jaehyun, quien estaba parado junto al jardín, observando las rosas. Cuando escuchó los pasos de Taeyong acercarse, levantó la vista y le sonrió.
"Buenos días, Tae, ¿cómo te sientes hoy?" preguntó Jaehyun con voz suave.
El corazón de Taeyong latió rápidamente al escuchar la voz de Jaehyun. Dios, estoy enamorado, pensó. Tratando de mantener la compostura, le devolvió la sonrisa.
"Buenos días para ti también. Me siento bien, con un poco de nervios, pero bien. ¿Y tú?", respondió Taeyong, acercándose para abrazarlo en forma de saludo. Jaehyun lo abrazó con fuerza, su presencia brindando una extraña sensación de calma.
"Me alegra mucho oír eso, y no te preocupes, estaré contigo todo el día", dijo Jaehyun con una sonrisa tranquilizadora. "Y estoy bien, ahora que estás aquí conmigo."
Esas palabras hicieron que Taeyong sintiera una mezcla de nervios y emoción al mismo tiempo que no supo cómo manejar. Su respuesta fue un ligero golpe en el pecho de Jaehyun mientras comenzaba a caminar apresuradamente hacia la calle.
"Deja de jugar y ven, ¡llegaremos tarde!" dijo Taeyong, con las mejillas levemente sonrojadas.
La risa de Jaehyun resonó detrás de él mientras corría para alcanzarlo. "¡Oye! ¡Espérame!"
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