-Gokú se nuevo se gira a verlo.
-¿Aún quieres a tu esposa? -Gokú agacha la cabeza.
-Sí, pero presiento que ella no me quiere -desciende y se sienta en una piedra grande, que se encontraba en un llano.
-Kakarotto -Vegeta estaba para sorpresa de todos un poco preocupado. Pero era verdad, varias veces habían visto a Milk lanzar comentarios mordaces sobre Gokú -Cambiemos de tema -se sentó a un lado de él -¿Qué piensas sobre mi? -Gokú se giró a verlo.
-Bueno, te has convertido en alguien bastante diferente, en alguien bastante agradable. Ya no eres el Vegeta que yo conocí. Ya no quieres destruir la tierra, ni buscas la vida eterna, como antes y eso lo admiro en ti. Aparte eres un guerrero admirable, creo que tu padre estaría orgullosos de ti -Gokú hablaba sinceramente.
-Vaya que eres franco, Kakarotto -suspira -Bueno, ahora te diré que pienso yo de ti -le toma ambas manos- Conviví con muchos saiyanes, Kakarotto y creía que todos éramos de piel un poco morena o bronceada, pero, al verte a ti me di cuenta de lo equivocado que estaba -le pone una mano en la mejilla a Gokú -Tú eres diferente a ellos, a nosotros, eres. hermoso -Gokú lo vio sorprendido (0 y van 3)-Mientras nuestras miradas estaban llenas de odio, pelea y venganza. En la tuya sólo veo el amor y la pureza de tu alma. Mientras de nuestras bocas salían palabras de venganza. De la tuya salen frases dulces, y te digo lo mismo que tu me dijiste, Kakarotto. Tu padre estaría orgulloso de ti, al igual que mi padre: El rey Vegeta -Gokú sonrió.
-Gracias, pero si nunca me hubiera golpeado la cabeza., tal vez nunca hubiera tenido este carácter -Vegeta se pone pie enfrente de él.
-Eso nunca podríamos saberlo -lo abraza y Gokú respondiendo a su abrazo, se recarga en su hombro -Mi pequeño Kakarotto (en sentido literal hombre) -Vegeta le pone una mano debajo de la barbilla y le alza el rostro, besándolo en los labios.
Después con su propia lengua el príncipe, le separó los labios y sus lenguas comenzaron a enredarse la una con la otra. A Vegeta comenzó a gustarle el sabor del néctar tan dulce que salía de los labios y boca de Gokú, lentamente descendió ambos brazos y lo abrazó por la cintura -Gokú yacía sentado, mientras que el príncipe estaba de pie. Vegeta sintió que los brazos de la persona amada (cursy) le abrazaban el cuello.
Gokú sentía su corazón a latir a mil por hora.
Le había gustado lo que sintió con Píkoro hace un tiempo, y después con Yamcha, pero con Vegeta era distinto, tal vez sentía amor por él.
Pero, preguntémosle más bien a Vegeta sobre sus sentimientos. ¿Estará tratando de abordarlo solamente? ¿Realmente querrá derrotarlo?. ¿Querrá destruir la tierra?. Pero en el rostro del príncipe se dibuja una sonrisa y estrecha al otro saiyan contra su pecho, y le susurra algo en el oído. De una forma inusual en él: Dulce.
-Te amos, eres lo mejor de mi vida -Gokú esboza una sonrisa muy dulce y se recarga en el pecho del otro saiyan.
-Vegeta ¿realmente me amas? -le preguntó.
-Por supuesto que te amo. Era una gran mentira que te odiaba. La primera vez que te vi, sentí que mi corazón saldría de mi pecho, pero supe disfrazarlo -suspira sobre su cabeza -Kakarotto. Cuando Krilin estuvo a punto de matarme, una gran tristeza me invadió, pero la esperanza renació cuando tú me perdonaste. En silencio di gracias a Dios y feliz me iba por que te vería de nuevo -de nuevo lo besa, pero esta vez, profundamente.
-Vegeta -el príncipe oyó un susurro muy suave en su oído. Parecía el sonido del canto de un ángel. Gokú tenía una voz hermosa y después Vegeta se sentó a su lado y lo abraza por la cintura.
-¿Querías decirme algo? -le pregunta de nuevo de una manera dulce y Gokú negó con la cabeza y sonríe, para después recargarse en el hombro de Vegeta.
