Osamu estaba con su hermano gemelo saliendo del colegio. Enfrente de la salida estaba su mejor amigo, Suna Rintaro con una chica, apenas la conocía y ya tenia sentimientos por ella. Osamu se quedó un par de segundos parado viendo a su amigo y su “actual pareja”. Entre tanta gente Suna no pudo notar que su mejor amigo lo estaba mirando. El gemelo del chico volvió por su camino, ya que iba hablando solo.
- ¡Samu, te estoy hablando! - Dijo su hermano haciendo una rabieta, pero vio que su gemelo miraba a un lugar en específico. - ¿Qué miras, Samu? - Dijo intentando mirar a la misma dirección que su hermano. Su hermano se quedó cayado por unos instantes, hasta que finalmente habló
- Me enamoré de una chica- Dijo volviendo a caminar como si nada. El resto del camino se basó en preguntas de Atsumu sobre aquella chica.
- ¿Cómo sabes qué estás enamorado de esa chica? – Dijo el rubio mirando a su hermano
- ¿No dejarás de preguntar? – Respondió Osamu quitando la vista de su libro para poder mirar mal a su hermano.
-Sabes que no lo haré- El rubio respondió mirando a su hermano con una sonrisa.
- Bien – Dijo Osamu cansado de las preguntas de su hermano, cerró su libro y se acomodó para poder platicar bien. -Odio admitirlo, pero mi corazón se acelera y no se detendrá. - Su hermano estaba apunto de continuar. -Me tiene muy mal, quiero todo lo que ella tiene- Su hermano cambió su mirada burlona a una mirada confundida. -Esa sonrisa y esa risa de media noche que le está dando ahora. - Osamu comenzó a apretar su libro con rabia. -Quiero probar sus labios, sí, porque ellos saben a él. Quiero ahogarme en una botella de su perfume, quiero su largo y rubio cabello, quiero su toque mágico…si porque tal vez entonces…él me querrá también- Dijo con la voz entrecortada y lágimas en los ojos. -Así que si, me enamoré de una chica- Dijo sollozando.Atsumu no pudo hacer más que abrazar a su hermano, él había creído que su hermano había superado su amor por Suna, pero al parecer no lo hizo…ni lo hará. Atsumu sufría por su hermano. Osamu correspondió el abrazo de su hermano.
Los días pasaban, las ojeras de Osamu se notaban cada vez más así cómo su tristeza. Sus amigos estaban preocupados por él, así que, su mejor amigo se acercó a él y le preguntó si podía acompañarlo a su casa, Osamu no hizo más que asentir. Osamu no quería pasar más tiempo con su mejor amigo, pero no pudo decir que no, finalmente tenía sentimientos por su amigo. Llegó la hora de la salida y Osamu comenzó a guardar sus cosas, después comenzó a caminar, así que su amigo tuvo que correr para poder alcanzar a su mejor amigo.-Hola Samu, ¿Todo bien?, ¿Por qué no me esperaste? – Dijo intentando recuperar el aliento caminando junto a su amigo.
-Sí, todo bien. Lamento no esperarte, m
e olvidé -Dijo con tono indiferente caminando sin mirar a su amigo.- ¿Qué pasa, Osamu? No me mientas, somos mejores amigos, ¿No? -Dijo Suna mirando a su acompañante con una sonrisa. Osamu solo quedó en silencio. - ¿Te gustaría ir por un café y después al parque? Como en los viejos tiempos. -Dice mirando a su compañero.
-Claro- dijo caminando sin ninguna expresión. Suna creyó que su amigo había cambiado su actitud, pero tal vez siempre había sido así.
Después de pasar a la cafería fueron directo al parque. Suna solo le habló de lo “increíble” que era su “compañera”. Osamu era lastimado por cada palabra que soltaba de ella, quería llorar, pero no podía hacerlo.
-¿Por qué tienes tantas ojeras, Samu? -Dijo Suna bebiendo su café frío.
-No logro dormir, no logro tener paz…pensando en ella…debajo de las sábanas de su cama-Dijo tomando su café.
- ¿Con qué te gusta un hombre “prohibido”? -Dijo sonriendo.
Osamu pensó las cosas, tenía que sincerarse con su “amigo”.
-La manera en la que ella te susurra, la manera en la que ella te atrae…- Osamu dijo susurrando. Suna miro confundido a su amigo. -Dios sabe que lo he intentado, pero no puedo sacarla de mi cabeza. - Suna comenzó a fruncir el ceño, Osamu siguió hablando.
-Quiero probar sus labios- Suna se levanto y comenzó a empujar a su amigo tirándolo al suelo, antes de que pudiera dar el primer puñetazo Osamu habló desde el suelo. -Sí, porque ellos saben a ti- Suna lo comprendió todo, lo único que pudo hacer era mirar a su compañero. -Quiero ahogarme en su botella de perfume, quiero su largo y rubio cabello, quiero TÚ toque mágico -Dijo Osamu desesperado mirando a su amigo, ambos tenían lágrimas en los ojos. -Sí…porque tal vez entonces…tu me querrás también. Así que si, estoy enamorado de una chica, odio admitirlo, pero mi corazón se acelera y no se detendrá- Dijo Osamu refiriéndose finalmente a Suna. El chico tomó su maleta escolar y se fue caminando de ahí.
Suna no pudo ir detrás de su amigo a confesarle sus sentimientos, le gustaba ser correspondido, no se esperaba que fuera correspondido, por eso se sorprendió. Finalmente, el sentía lo mismo por Samu y todo era un mal entendido, la chica sólo era su hermana, por eso Suna se molestó, Osamu nunca llegó a conocerla.
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Haikyuu one shots
Fanficone shots medio deprimentes de haikyuu basados en canciones, a mi parecer.