rosario - +18

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Predio Lionel Andres Messi, Ezeiza

Termine de acomodar toda la sala de reuniones, chequee que estuviera todo en orden, las dos copas, dos botellas, ambas agendas y lapiceras en sus lugares.

Sali de la sala y me dirigi a mi oficina, mis compañeros ya se habian ido, Lionel y Pablo tenian una reunión de última hora por una urgencia y como yo vivia más cerca, me tuve que quedar, hace más de dos meses que era la encargada de Ceremonial y Protocolo en la AFA.

Me sente frente a la computadora para organizar la agenda de los próximos días, Lionel tenia dos reuniones con Jorge Messi y con el Chiqui.

Pablo tenia una reunión con todos los padres de la Sub-15.

-Permiso- levante mi vista y Pablo se asomo por la puerta - ya arrancamos, en una horita ya podes pasar a ordenar todo- mire mi reloj y marcaban las 21:15hs.

-Perfecto— dije sin levantar la vista de la computadora — necesitas algo más?— pregunté, Pablo rodo los ojos y salio dando un portazo.

El no me podia ver a mi y yo a el tampoco, era el tipo más insoportable del mundo, siempre le encontraba un pero a todo, nada la gustaba y todo le molestaba.

Lionel era nuestro intermediario en las organizaciones y reuniones, era mucho más relajado, dos polos opuestos.

Acomode un par de cosas y cuando mire el reloj ya habia pasado más de una hora, prepare mi bolso y cerre mi oficina.

Cuando entre a la sala aun estaban los dos.

—En una hora te dije nena— rode los ojos y deje mi bolso en un costado para juntar todo.

—A mi no me digas nena y ya paso una hora, no tenes reloj vos?—

—Por lo menos podrias haber golpeado— lo mire a los ojos y con una sonrisa le respondí.

—Es verdad, disculpame, a ver si en una de esas los encontraba en paños menores— Lionel solto una risa mientras que el otro echaba humo por las orejas.

—Bueno, nos vemos mañana Romi, chau Pablito— salude a Lionel y Pablo salio detras de el sin siquiera despedirse.

Mientras terminaba de ordenar vi que habia un celular en uno de los sillones, lo prendi y vi a Pablo junto a sus hijos frente a una basílica, que lindo.

—Me lo devolves?— me sobresalte y baje la mano rapido volviendo a poner el celular en el sillon.

—P..perdón, yo queria saber de quien era— se acerco y lo agarro, lo guardo en el bolsillo — son tus hijos?—

—Si— respondió, asentí y agache la mirada — no los veo hace un montón— lo mire.

—Yo no quiero ser asi de pesada pero vos sos insoportable Pablo, todo te molesta— dije mientras me alejaba — nunca estas conforme, todo lo que yo hag..— senti sus manos en mi cintura.

—Te pensas que soy asi porque soy malo?— susurró en mi oido — no te puedo ver porque me pones loco, me volves loco nena— mi corazón estaba acelerado, muy, de solo pensar que se le estaban marcando los brazos con el agarre en mi cintura mi cabeza volaba e imaginaba mil cosas por segundo.

—P..pablo, y..yo, vos m..me gustas mucho— dije como pude, sus manos estaban dentro de mi remera acariciandome el abdomen mientras su boca estaba pegada a mi oido.

—Ya se que te gusto, te pensas que no me doy cuenta de como me miras?— entreabri mi boca al sentir como me apreto contra el, haciendome sentir que yo también le gustaba y que esta situación iba a pasar a mayores.

Shots- scalonetaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora