Pacto - Pedri & Pablo Gavi

8- Solo es una niña

Lili

- Voy a ducharme. Gavi, cuando vengan los chicos ábreles tu -dijo Pedri y después subió a su habitación para ducharse

Yo me quedé hablando con Gavi hasta que llegaron los chicos.

- ¿pedimos Mcdonald's para cenar? -propuso Ansu y todos aceptamos- pues voy a pedir

- Yo quiero lo de siempre, mientras voy a subir a por mi móvil que está cargando -dije

Entre dentro de casa y subí a la habitación de Pedri.

Desenchufé mi móvil y cuando me di la vuelta para salir de la habitación Pedri acababa de salir del baño con una toalla enroscada en su cintura.

Mi vista se desvió a su abdomen.

- mis ojos están aquí -murmuró mientras ponía su mano bajo mi barbilla y levantaba mi cara suavemente haciendo que le mire a los ojos

- déjame disfrutar de las vistas ¿no? -murmure con una sonrisa pícara

- me están dando unas ganas de comerte la boca, sino fuese por Gavi... Eres mi tentación -murmuró

- La mejor manera de liberarse de una tentación es caer en ella -murmure y después me aleje de él para salir de la habitación

Una vez abajo me senté al lado de Gavi, que estaba solo en el jardín.

- Nunca nos has hablado de tu padre -dijo mirándome y yo hice una mueca

- Mi padre... -dije

15 años antes
Lili, 6 años
Madrid, España

Me encontraba en mi habitación sentada en el suelo detrás de mi cama, escondida, con mis piernas encogidas, mientras con mis manos tapa mis oídos y lloraba. Fuera, concretamente en el salón, mis padres estaban peleando.

- ¡ERES UN BORRACHO! -gritaba mi madre- Me voy a largar de esta casa junto a mi hija y no vas a volver a vernos en tu vida ¡voy a alejar a mi hija de ti! ¡Yo no tengo porque soportar esto y mi hija menos! ¡ella se merece una buena vida! ¡Tan solo es una niña de 6 años que no merece escuchar las barbaridades que dice su padre!

- ¡ERES UNA ZORRA! -gritó mi padre- ¡Lo único que quieres es separarte de mi para poder irte a la cama con quien te apetezca! ¡Y esa niña aprenderá de ti! ¡Las dos seréis igual de zorras!

- ¡Dios mío!, ¿tú te estás escuchando? ¡como puedes ser una persona tan asquerosa, estás llamando zorra a tu propia hija! ¡Eres un sinvergüenza! ¡No mereces que esa niña te llame padre! -gritó mi madre

Mi madre tenía razón, pero yo dejé de llamarle papá hace unos meses en el momento en el que por casualidad vi como él le pegaba una bofetada a mi madre y me puse a llorar por él miedo, el me vio se acercó a mi y me dijo "quieres que te de razones para llorar" Pero mi madre le frenó y a mi me mando para mi habitación

- ¡Debí de hacer caso a mi madre cuando me dijo que no me casara contigo, dijo que ibas a destrozarme la vida, y tuvo razón! -dijo mi madre

- ¡Lárgate de aquí de una vez! -gritó mi padre

- ¡Eso voy a hacer! ¡Mi hija y yo no nos vamos a quedar aquí ni un minuto más! -dijo mi madre y vino hacia mi habitación

Metió toda mi ropa y mis cosas en una maleta y luego hizo lo mismo con su ropa y sus cosas.
Me cargo en brazos y salimos de la casa sin dirigir una sola palabra a ese hombre que se quiso hacer llamar "papá" en algún momento.

En la actualidad

- dios mío, lo siento -se disculpo Gavi cuando termine de contar todo

- No pasa nada, tranquilo -dije

- Quizás por eso tu madre te intentaba proteger cuando comenzaste a salir con Mateo, quizás al ser un chico de barrio ella se pensaba que iba a ser como tu padre y tenía miedo de que pasases por lo mismo que ella -dijo Gavi

- Quizás, igual tienes razón -dije- Pero nunca le dio una oportunidad a Mateo. Sabes, Mateo me enseño a querer, me enseño lo que era el amor y lo que era que dos personas se quieran. Y eso para mi era algo que solo pasaba en las películas, en mi casa nunca lo había visto. Y su padre me enseñó lo que era el amor paternal, él fue como un padre para mi, me dio ese amor de padre que nunca me dieron. -dije con los ojos llorosos- Mi madre siempre intento hacerme feliz con cosas materiales, pero nunca se dio cuenta de que lo que yo necesitaba era amor y que alguien me escuchara y apoyara en lo que quisiese hacer, nunca se paro a preguntar '¿como se siente mi hija?' Su hija se sentía abandonada, sola, triste y enfadada, decepcionada, con impotencia, con baja autoestima, pero nadie se daba cuenta y me lo callaba todo para mi, porque no era capaz de expresarme, ni lo soy, me cuesta mucho expresarme, pero con Mateo era todo tan fácil, podía ser yo misma sin que me juzguen, cuando decía algo me escuchaba, se preocupaba por mi

- Eres tan fuerte -dijo Gavi pasando su brazo por mis hombros y acercándome a él

Yo le abracé por la cintura y escondí mi cara en su pecho.