Cap 3

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El día de la boda fue un día perfecto todo salió perfecto, la primera noche como pareja de recién casados fue perfecta.

Una noche en donde nuestros cuerpos se juntaban como muestra de amor, una muestra de amor que quise dar sin obligación ni presión por parte de terceros (otras personas) pues yo era virgen y él lo sabía.
La luna de miel fue perfecta, pasamos increíble, obviamente hubieron muchas noches de pasión entre nosotros lo cual fue maravilloso, pues lo estaba realizando con el amor de mi vida.

Pero en cuanto llegamos a casa toda esa maravilla se desmoronó.

- Bueno - suspiro - ponte a organizar me voy a una reunión importante

- Pero no estás cansado - le dije -

- No

Ese día se marchó y llegó a la madrugada, pasaron varios meses y se comportaba igual.

Siempre me preguntaba el porque fue su cambio, que hice mal, que sucedió con el César de dieciocho años que me demostraba valor.

Un día llegó borracho y ..

- ¡¿ Que haces ?! - le grite - ¿ Por qué lo hiciste ? - Le reclame llorando -

- No grites - me pegó una cachetada - !Sabes porque lo hice ¡ - sonrió - ! En todo este tiempo solo quería tu virginidad ¡ - soltó una carcajada - Incluso hice una apuesta y gane.

- No.. tu .. tu eras mi mejor amigo - Solté entre lágrimas-

- Esa fue mi ventaja, sabía cómo conquistarte y no fue difícil - río- Sabes porque me metí con Anna - Negué - porque ella siempre ha sido el amor de mi vida y está más buena que tú.

Ese día me destruyó por completo, después de eso siempre me pegaba de una forma que no quiero contar.
Pero espero que tengan una idea con esto.

No podía mirarme al espejo pues tenía moretones en mi cara, espalda, y brazos.

- Espero que los tapes con maquillaje, tenemos una reunión con nuestros padres.

Ante nuestros padres teníamos una relación perfecta, de hecho, era ante todo el mundo.

Después de los golpes me violaba, seré su mujer pero cuando no quiero hacerlo debes entender que es un no pero él no entendía nada.

Se supone que si te cásate conmigo fue para cuidarme, adorarme, protegerme e incluso seguirme enamorando después.

Pero creo que solo fui engañada por mi corazón.

Tú, quien juraste amarme hasta la muerte fue quien me llevo a ella.

Si están leyendo mi diario, espero que hagan justicia.

Y César me juraste un mar de amor, pero solo me diste un mar de lágrimas en medio del amor que yo te tenía.

Un Océano De LágrimasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora